Al menos mil 200 empleos en el sector de la construcción se encuentran paralizados por el cierre de constructoras, principalmente pequeñas y medianas empresas, que no pueden acceder a los concursos de licitación en obra pública por el excesivo monto contable que impone el gobierno del estado.

De acuerdo con la presidenta de la Asociación de Empresas de la Construcción (AECO), Martha Moysen Leal, el 20 por ciento del total de socios han cerrado sus puertas de manera temporal, debido a la falta de obra pública, considerando los montos excesivos impuestos por el gobierno del estado, como es el caso del Centro Integral de Servicios (CIS) que contempló un capital de 700 millones de pesos.

Para enfrentar estos montos, las constructoras socias de la AECO plantean agruparse entre varias firmas, a fin de sumar el capital contable requerido para las magnas obras del gobierno del estado y que han sido “ganadas” por constructoras foráneas.

Actualmente, constructoras de Querétaro, Distrito Federal y Jalisco, son responsables de las grandes obras públicas del gobierno estatal.