En lo que va de 2011 suman más los efectos negativos generados por la facturación electrónica, y es que de acuerdo con el presidente del sector de Artes Gráficas de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra), Pablo Martínez Apango, cada vez decrece más el número de imprentas con posibilidad de ofertar esta nueva modalidad.
Para lograr la transición al sistema de facturación electrónica, los empresarios tienen que cubrir pagos por las licencias para expedir folios digitales, cuyo monto oscila entre los 10 mil a 25 mil pesos en promedio.
En suma a ello, los interesados en ofertar esta modalidad digital también deben realizar montos cuantiosos en inversión para la remodelación de sus equipos gran formato que van desde los 500 mil pesos hasta los 5 millones de pesos.
Esta situación, además del desconocimiento sobre el tema, ha incidido en el cierre de 50 empresas del sector Artes Gráficas y la pérdida de 250 empleos, durante el primer semestre del año.
El representante del sector aseveró que la transición de la impresión en papel a la digital ha sido complicada para los empresarios, considerando que el Sistema de Administración Tributaria (SAT) impuso como obligatoria esta medida a partir del 1 de enero de 2011.