El inicio de año se presenta incierto para la economía mexicana, ya que la situación en el mundo es delicada y se prevé un menor crecimiento global, alertó la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (Canacintra).

En su publicación semanal “Sinopsis económica”, el organismo estima conveniente poner en marcha medidas precautorias que protejan e impulsen a la planta productiva hacia crecimientos importantes.

Asimismo, lograr acuerdos y consensos para aprobar las reformas estructurales, a fin de alcanzar una tasa de crecimiento más elevada.

Las perspectivas de organismos internacionales como la Organización de las Naciones Unidas (ONU), el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM), señalan una disminución en el crecimiento del orbe este año.

Por ello, dijo, es recomendable tomar en cuenta aspectos como la crisis que viven los países europeos y la desaceleración de Estados Unidos.

Se debe tener presente que la economía nacional depende en gran medida del comportamiento de algunas variables externas, en especial de lo que ocurre al interior de la economía estadounidense, refiere.

Señala que sería conveniente poner en marcha medidas precautorias que protejan e impulsen a la planta productiva nacional hacia crecimientos importantes, ya que ello permitiría generar más empleos y, por ende, más riqueza para el país.

Advierte que mientras las disparidades estructurales no sean erradicadas, la incertidumbre económica, característica en estos tiempos de bajo crecimiento, seguirá afectando a la economía mexicana.

Así, expone, a pesar de contar con fundamentos macroeconómicos sólidos, la economía no está aprovechando su potencial, por ello son necesarias las reformas estructurales que no se han podido sacar para tener una tasa de crecimiento más elevada.

El mercado interno

Indica que México requiere fortalecer su mercado interno, así como consolidar el desarrollo regional y sectorial con una estrategia que articule las cadenas productivas y aproveche las vocaciones productivas de las regiones.

También debe continuar el esfuerzo para combatir a la piratería, el contrabando, la economía informal y la competencia desleal, aspectos que afectan a la industria.

Se requiere además una política fiscal promotora del desarrollo que brinde seguridad, simplifique el sistema tributario, aumente el número de contribuyentes, la inversión, el ahorro interno, incentive la creación de empresas y fortalezca su estructura de capital.

En el documento elaborado por su Centro de Estudios Económicos, el organismo industrial plantea la necesidad de una política laboral que fomente la productividad, genere mejores ingresos y un marco jurídico acorde al entorno global.

“Si actuamos en este sentido, la reactivación del mercado interno y la aprobación de las reformas estructurales darán certidumbre al país, se generarán más empresas y con ello mayores fuentes de trabajo”, añade.