Microsoft pretende hacer algo radicalmente diferente para vencer a Apple. Al mismo tiempo, también trata de copiar un modelo de negocio muy exitoso para ser como la firma de la manzana.
Cuando Windows 8 debute este otoño, Microsoft lanzará una tienda de aplicaciones para el software de Windows. Por primera vez, la principal vía a la que recurrirán los usuarios de Windows para obtener aplicaciones de terceros será Microsoft mismo.
Es un modelo que le ha redituado a Apple y que ha sido copiado, con diversos grados de éxito, por muchos otros, en particular Google y Amazon. Apple, que se queda con una importante tajada de las ventas en su tienda de aplicaciones, obtuvo ingresos de 2,100 millones de dólares en el último trimestre de las aplicaciones de terceros y las ventas de música iTunes.
Aunque lucrativo, el modelo de la tienda de aplicaciones también puede ser restrictivo. Las aplicaciones tienen que ser aprobadas, y los escépticos señalan que los ‘curadores' de la tienda, esto es, quienes las seleccionan, pueden bloquearlas de la competencia. Por ejemplo, Apple se tardó más de un año en permitir Google Voice en el iPhone, un consentimiento que dio por la presión de los reguladores gubernamentales.
Las tiendas de aplicaciones también pueden ser fragmentarias. Algunas de ellas (e incluso algunos contenidos como los libros electrónicos populares) solamente están disponibles en determinadas tiendas. Eso abona a una experiencia de usuario frustrante.
"En este momento, la industria está en una etapa donde hemos transitado de una casi total interoperabilidad entre dispositivos a una fase altamente fragmentada", advierte Al Gillen, analista de IDC. "Como consecuencia, cuando seleccionas un dispositivo, no importa lo estupendo que sea, si el ecosistema que soporta el dispositivo no tiene todas las cosas que quieres, te disuadirá de comprarlo".
Este es un problema nuevo para Microsoft, al menos en el ámbito de los ordenadores de escritorio. Con una cuota de 92% en el mercado de la PC y una plataforma abierta, los usuarios de Windows nunca han tenido que preocuparse por que ciertos programas puedan ejecutarse en Windows. Es casi un hecho que así será.
Pero para Windows 8, Microsoft está imitando la ruta de Apple. Las PC estándar con Windows 8 vendrán con dos modos: la interfaz táctil "Metro" y un modo "desktop" más tradicional, tipo escritorio. Las aplicaciones para Metro sólo estarán disponibles a través de la App Store de Microsoft.
Los usuarios también pueden instalar el software tradicional en el modo ‘desktop'- con una vital excepción: Microsoft está vendiendo una segunda versión de su nuevo software Windows, llamado RT, que se ejecutará en los potentes procesadores ARM que alimentan la gran mayoría de smartphones y tablets. El software de terceros para Windows RT sólo estará disponible a través de la tienda de aplicaciones de Microsoft.
Es bastante evidente que se trata del inicio de un control más condicionado.
"Windows 8 es un producto de transición, la incómoda etapa adolescente de Microsoft al madurar hacia un mundo post-PC," comenta Sarah Rotman Epps, analista de Forrester Research. "ARM y Metro son el futuro de la plataforma Windows, pero no están listos para deshacerse completamente del desktop por el momento".
Microsoft mismo espera que Metro reemplace en última instancia la experiencia tradicional del desktop o escritorio. Es la jugada principal de Microsoft en los segmentos de rápido crecimiento como el mercado de las tablets. Para 2016, las tablets con Metro representarán el 17% de la cuota del mercado mundial de pizarras, predice Forrester Research.
Eso despierta el recelo de algunos desarrolladores acerca de los controles que Microsoft esté desplegando. Mozilla, fabricante del navegador Firefox, publicó un colérico comentario en su blog a principios de este mes, censurado a Microsoft por auspiciar "un retorno no deseado a la edad oscura digital". Google se hizo eco de Mozilla, diciendo que Windows RT "restringe la elección del usuario y la innovación".
Un representante de Microsoft declinó pronunciarse sobre esas críticas.
Esto es lo que realmente preocupa a Google y Mozilla. Cuando los usuarios de Windows RT cambien al modo desktop, el navegador de Microsoft, Internet Explorer, será la única opción para navegar la Red. Esto es similar a la forma en que Apple alguna vez operó - por años, el navegador Safari era el único permitido en el iPhone - pero los desarrolladores lo consideran una señal inquietante.
Bienvenido al mundo comisariado por Windows.
"Estás completamente a merced de la compañía que esté dirigiendo la tienda de aplicaciones", dice Tim Tisdall, un desarrollador independiente de software familiarizado con las múltiples tiendas de aplicaciones. "Yo no sé si muchos desarrolladores de Windows querrán adoptar un modelo donde su futuro dependa de que Microsoft les permita continuar".
Desde luego, la moneda también tiene otra cara: donde algunos ven restricciones, otros ven oportunidades.