Para septiembre de este año, mil 300 trabajadores eventuales habrán dejado de trabajar en la planta alemana de la VW. Los trabajadores sindicalizados, al rechazar este viernes el esquema del 4x3, orillaron a la planta a no contratar a mil 300 trabajadores eventuales.

La economía estatal está anclada a la industria automotriz. El 25.6% del Producto Interno Bruto (PIB) estatal es generado por la industria automotriz. La producción de la armadora ha disminuido. En el primer semestre del año la armadora producía 2 mil 500 automóviles diariamente.

La producción de la planta cayó a 2 mil 175 vehículos después del mes de julio. Pero para septiembre solamente se requerirán 2 mil 060 vehículos. Es decir, se dejaron de producir 440 vehículos diariamente en ese período.

En los planes de la armadora está la producción del Golf VII en 2014 desde la planta de Puebla, por lo que incorporarían de nueva cuenta a los trabajadores eventuales que desde septiembre dejen de laborar en la empresa.

La “tabla de salvación” parece ser la producción del Golf en la planta automotriz de Puebla el próximo año.

A principios de 2013, el consorcio automotriz alemán anunció que para el primer cuarto del 2014 se iniciaría la producción del Golf en su búsqueda de ganar presencia en el mercado del continente.

La inversión alemana busca suplir la demanda de este vehículo en Norteamérica y América del Sur, y forma parte de un plan de inversión millonario en sus plantas del continente americano.

La producción del 2014 en las plantas de VW en América y Puebla se sumará a la producción en sus plantas de Alemania, en Wolfsburg y Zwickau.

De acuerdo con los analistas, la fabricación del Golf obedeció en plantas como la VW de México a los bajos costos salariales, entre otros factores.

Según ejecutivos alemanes de la compañía, la apuesta de VW es producir 75% de los vehículos de la compañía que se venden en Norteamérica desde el mismo continente americano. Una tendencia que le permitiría fortalecer su posición en el mercado a la compañía alemana.

A principios de año se puso en funcionamiento la planta de VW en Silao, Guanajuato.


En junio de este año ya se vislumbraba la caída en la producción de la planta de Volkswagen en Puebla.

Un reporte publicado en la revista Automotive News ubicaba a la planta de Volkswagen de Puebla en el ranking de las plantas de Norteamérica con mayor producción en el continente, encabezando la lista. Para junio de este año, la planta de la VW en Puebla cuenta con una producción de 52 mil 194.

La planta de la General Motors de Silao se colocaba también en la lista con un volumen de 32 mil 76. En la lista de junio se incluía también a la planta de Nissan Aguascalientes, con un volumen de producción de 40 mil 271 automotores. La misma referencia señalaba en junio de este año la caída de 14% en la producción de la planta de la VW de Puebla.

Además, de acuerdo con datos del BBVA Research, 25.6% del Producto Interno Bruto estatal es generado por la industria automotriz. Solamente en Aguascalientes la dependencia del Producto Interno Bruto estatal es más alto que el de Puebla, la industria automotriz de Aguascalientes aporta 35.3%, según el mismo reporte.

Las cifras del análisis denominado “Industria automotriz, clave en el crecimiento económico de México” destacan que a nivel nacional la aportación de la industria automotriz al PIB nacional es influyente.

Se estima que en 2011 México ocupó el octavo lugar por unidades producidas y el sexto en unidades exportadas. La rápida recuperación de la producción en la pasada crisis, su capacidad exportadora y los flujos continuos de IED han ampliado su capacidad productiva con plantas flexibles, que le permiten adaptarse rápidamente a cambios en el entorno.

De acuerdo con el reporte de BBVA research, México cuenta con una capacidad productiva sustentada en bajos costos de operación derivados de su ubicación geográfica, bajos niveles salariales, inversiones recientes y las ventajas del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), que la convierten en una industria muy eficiente a nivel mundial. De hecho, esta industria es una de las cadenas de valor más amplias e integradas del país operando con altos estándares de calidad y productividad a nivel mundial.

La importancia de la industria automotriz en la economía nacional no se puede ocultar, puesto que contribuye con 3.6% del PIB, 20.3% del PIB manufacturero y 28.4% de las exportaciones manufactureras del país, y una de las mayores empleadoras del país con más de 550 mil empleos directos e indirectos.

Además, el reporte de BBVA research señala que México se encuentra entre los 10 principales productores a nivel global de la industria automotriz. Los datos que cita el reporte señalan que para 2011 se estima que México ocupó el octavo lugar como productor de vehículos en el mundo. En menos de dos años escaló dos posiciones superando a Francia y España. Asimismo, en 2011 continuó siendo el primer proveedor de autopartes hacia EEUU con 34% de cuota de mercado.

“Industria automotriz, clave en el crecimiento económico de México”, que data de enero del 2012, señala que la industria automotriz ha aprendido las lecciones de la caída del mercado automotriz en los Estados Unidos. En el período del 2000 al 2008 únicamente 15% de la producción se exportaba a los Estados Unidos. Para 2011, la exportación se había diversificado hacia mercados asiáticos, europeos y de América Latina, 36.5% se exportaba hacia estos sitios.

El reporte de la BBVA research señala esta tendencia que ha diversificado la exportación, en este caso de vehículos ligeros: “El principal destino de la producción de ligeros de exportación en 2011 fue el mercado de EEUU (63.5), seguido de los mercados de Latinoamérica (14.3%) y Europa (10.3%). Actualmente los destinos más dinámicos son Latinoamérica (Brasil, Argentina y Colombia), Europa y Canadá. De las principales empresas exportadoras de vehículos, Ford encabeza la lista seguida muy de cerca por GM, VW y Nissan”.

Otro dato significativo es el crecimiento que la producción de la planta ha tenido. Sin embargo, contrastan los números con la caída de la producción, que se estima alcanza 13%.

A partir del mes de septiembre, mil trabajadores eventuales de la VW quedarán sin empleo debido a la contracción del mercado automotriz europeo. Los trabajadores rechazaron el esquema de 4x3 que preservaba sus fuentes de trabajo, lo que orilló a la empresa a la drástica medida ante la caída de la producción automotriz.

Luego de la consulta realizada este jueves y viernes, los trabajadores sindicalizados de la VW votaron en contra del esquema 4x3 y, como consecuencia de haber rechazado el esquema, la armadora despedirá a partir de mes de septiembre, una vez que concluyan su contrato temporal, a mil trabajadores eventuales contratados para la producción del Bettle, Bettle convertible y Jetta clásico al caer su demanda en el mercado europeo.

La decisión que tomó la armadora alemana se tomó debido a la contracción del mercado automotriz europeo, que obligó a disminuir la producción del vehículo. La producción de la armadora ha disminuido. En el primer semestre del año la armadora producía 2 mil 500 automóviles diariamente. La cifra cayó a 2 mil 175 vehículos después del mes de julio. Pero para septiembre solamente se requerirán 2 mil 060 vehículos. Es decir, se dejaron de producir 440 vehículos diariamente en ese período.

La producción de la empresa automotriz disminuyó 13% en sus líneas de Beetle, Beetle Convertible y Jetta clásico.

El vocero de la VW, Thomas Karig, señaló este viernes que la empresa ofreció al sindicato de trabajadores de la armadora un esquema de 4x3 para frenar la ola de despidos. Karig defendió la benevolencia de la propuesta de la armadora, que evitaba el despido de los trabajadores. Además, atenúo la medida y consideró que la no contratación de mil trabajadores sería temporal.

El vicepresidente de Relaciones Corporativas de la armadora señaló que en el próximo año podrían contratarse a mil trabajadores más para la línea de producción del Golf VII. Una hora después, la parte sindical consideró incierta la recontratación de trabajadores y resaltó la posibilidad de que se agravara la crisis en el mercado automotriz europeo.

En ese contexto, ante la disminución de la producción de la fábrica de automóviles, la armadora ofreció a los trabajadores dos opciones para compensar sus costos: o se implementaba un esquema de 4 días laborables y 3 días de asueto para los trabajadores eventuales o se despedía a mil trabajadores.

Karig, quien dio una rueda de prensa una hora antes de que el sindicato anunciara la elección de los trabajadores, no quiso adelantar el sentido de la decisión de los sindicalistas. Sin embargo, la misma había trascendido durante el día: el rechazo al esquema 4x3.

Por la noche del viernes, en el auditorio del sindicato de trabajadores de la VW, durante una rueda de prensa con la comisión revisora de la consulta, el dirigente sindical Antonio Flores Trejo anunció los resultados en un ambiente gélido entre los trabajadores.

A pesar del llamado del sindicato a tomar el esquema de 4x3, que evitaba despidos de trabajadores, los sindicalizados votaron en contra de la propuesta de la empresa. Sólo 30% de los trabajadores votó a favor de la propuesta, 70% votó en contra del esquema 4x3.