La recién nombrada presidenta de la Comisión de Derechos Humanos en Puebla (CDH), Rosa Isela Sánchez Soya, se pronunció en contra de la propuesta del gobernador electo, Alejandro Armenta Mier, para aplicar la "castración química" contra violentadores sexuales, debido a que atenta contra la dignidad y los derechos fundamentales.
A través de sus redes sociales, la ombudsperson manifestó que la medida es incompatible con los estándares internacionales, debido a que es “cruel, inhumana y degradante”.
Esto a un día de que el mandatario morenista planteó este procedimiento como alternativa para frenar a los delincuentes sexuales.
A lo que Sánchez Soya respondió: “con relación a las declaraciones realizadas por el gobernador electo, la CDH se pronuncia en contra de considerar la castración química como sanción, pues su implementación es un trato cruel, inhumano y degradante, violatorio de derechos humanos”.
En este sentido, la presidenta de la CDH señaló que existen otras formas de sanción que respetan los derechos humanos y no incurren en prácticas degradantes.
“Compartimos la indignación que estos delitos generan y nuestra solidaridad está con las víctimas, pero no coincidimos con las penas que atentan contra la dignidad e integridad personal, física y mental de las personas”, apuntó en su cuenta de X.
Dicho método consiste en una inyección química a los hombres para “disminuir el líbido”.
Rosa Isela Sánchez refirió que al frente del organismo estatal se trabajará por la protección de los derechos de todas las personas, en especial de aquellas que sufrieron o sufren violencia, pero dijo que se hará con acciones de pleno respeto a las garantías individuales.
Fue el pasado martes cuando Alejandro Armenta anunció que, una vez que asuma funciones el 14 de diciembre próximo, enviará esta iniciativa al Congreso local, ya que aseguró durante su sexenio no se permitirán abusos contra niños, niñas y mujeres, por lo que aplicarán todo el peso de la ley.