La fabricación de delitos ha resultado un excelente negocio para una servidora pública quien ordena que se modifiquen los informes de las personas que son puestas a disposición en Tehuacán y Tecamachalco.
En la zona Sur-Oriente, una fiscal, presuntamente está cometiendo actos de corrupción y abuso de autoridad. Los trámites que son gratuitos no avanzan si antes los interesados no pasan por su oficina.
Con la fabricación de delitos se puede retener a las víctimas en prisión preventiva y después con un pago de 50 a 100 mil pesos, le dan entrada a procedimientos abreviados para la libertad.
¿Sabrá el fiscal Gilberto Higuera de estos actos?, cuestiona la columna Porque los muertos corren rápido del periodista Alfonso Ponce de León.
