Menores de origen latino pidieron a través de cartas dirigidas al alcalde de Miami-Dade, Carlos Giménez, que sus padres no sean deportados y frene la discriminación, ello, como regalo de Navidad.

Los menores pidieron protección para sus familias durante una visita a la oficina del alcalde, en un acto en el que un mariachi interpretó varios temas navideños.

No quiero nada para Navidad, pero uno de mis deseos es mantener a mi familia protegida. No sólo mi familia, sino nuestra comunidad de inmigrantes”, escribió en una de las cartas Elena, de 17 años, cuyo padre fue deportado.

Por otro lado, Lucia Quiej, la madre de Elena, es una inmigrante guatemalteca que debe mantener además a sus otros cuatro hijos. La comunidad inmigrante se encuentra atemorizada luego de que el presidente electo Donald Trump prometió durante la campaña electoral construir un muro fronterizo con México y deportar a millones de indocumentados.

Tras recibir las cartas, el alcalde Giménez se comprometió a hacer lo que pueda para ayudarlos, aunque rechazó que Miami-Dade sea una “ciudad santuario” para indocumentados y dijo que el condado cumple con la ley.

Contamos con el alcalde Giménez y otros funcionarios para que hagan todo lo que esté a su alcance para proteger a las familias inmigrantes y que no permitan que las separen simplemente por ser indocumentados”, dijo Lis-Marie Alvarado, organizadora de la campaña nacional We Belong Together.

No obstante, el condado de Miami-Dade está incluido entre las 115 zonas que limitan la cooperación con las autoridades del Departamento de Inmigración, por lo que es considerada una ciudad santuario, según el Departamento de Justicia.