La curva de contagios de COVID-19 en Ecuador disminuyó en casi ocho meses de pandemia, tiempo durante el cual se logró contener la propagación del virus en los centros de atención primaria de salud, informó hoy el ministro de Salud Pública, Juan Carlos Zevallos.
"La curva va disminuyendo indudablemente", aseguró el ministro en una entrevista con la televisión local, en la que dio a conocer la situación actual de la COVID-19 en Ecuador.
Apuntó que el virus afecta más a las principales ciudades del país: Quito, Guayaquil (suroeste) y Cuenca (sur), "porque es mucho más difícil de controlar" la propagación.
Sin embargo, "a nivel del país los casos van disminuyendo, esa es la realidad", explicó Zevallos, al añadir que eso se refleja en la disminución de la ocupación de camas en hospitalización y en las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) de los hospitales públicos.
Zevallos difundió cifras que indican que a nivel nacional se registra un 63 por ciento de ocupación de camas con pacientes de la COVID-19 en las UCI, y un 30 por ciento en las otras áreas de hospitalización.
Agregó que en los últimos meses se ha contenido la COVID-19 a nivel de la atención primaria de salud, que incluye a dispensarios y centros de salud ubicados en barrios y comunidades.
"Es ahí donde se refleja, además, la poca ocupación de las camas, y obviamente, una disminución de la mortalidad, que es buen augurio para los ecuatorianos", explicó.
Según el reporte diario del Ministerio de Salud Pública, Ecuador registró 134 nuevos infectados de la COVID-19 y siete muertos en las últimas 24 horas, para totalizar 153.423 casos de contagio y 8.106 fallecidos confirmados.
El país sumó además 4.289 defunciones probables, mientras que la cifra de pacientes recuperados de la enfermedad se ubicó en 134.187.
Zevallos dijo que mientras no exista la vacuna contra la COVID-19, los contagios van a seguir aumentando, "porque las cifras que se muestran diariamente son cifras de casos que se van acumulando en el tiempo".
Con información de Xinhua.