El Gobierno de El Salvador exigió la renuncia de los responsables de las políticas migratorias de México, informó Cindy Portal, viceministra de Diáspora y Movilidad Humana de la Cancillería del país centroamericano, tras la muerte de siete de sus ciudadanos durante el incendio de una estación migratoria en Ciudad Juárez, Chihuahua.

Portal subrayó que El Salvador “exige que los culpables de este crimen puedan pagar con cárcel, que la Fiscalía (de México) haga el trabajo que le corresponde de hacer una investigación exhaustiva”.

Mientras, los restos de las víctimas llegaron a El Salvador y fueron entregados a sus familias, informó este domingo la funcionaria.

Los restos de los siete salvadoreños fueron transportados en un vehículo fúnebre desde Ciudad Juárez, un trayecto de 3 mil 500 kilómetros, por la dificultad de conseguir vuelos en Semana Santa, indicaron medios.

“Nos dimos a la tarea de que la mejor forma y la más expedita para poder repatriar los cuerpos de los connacionales era la vía terrestre".

“El pasado 6 de abril salió desde Ciudad Juárez esa carroza fúnebre", con escolta policial, y la empresa garantizó que llegaría al país en 72 horas, añadió la viceministra.

El pasado 27 de marzo 40 migrantes perdieron la vida durante el siniestro en el centro de detención, entre ellos 18 guatemaltecos, siete salvadoreños, siete venezolanos, seis hondureños y un colombiano.