El Consejo de Estado de China publicó este miércoles un libro blanco en el que defiende su actuación durante la pandemia de Covid-19, rechaza las acusaciones sobre el origen del virus en Wuhan y arremete contra Estados Unidos por, según sostiene, politizar el tema y estigmatizar a su país.
La publicación, difundida por medios estatales, incluye tres capítulos: dos dedicados a las contribuciones de China en la búsqueda del origen del SARS-CoV-2 y en la lucha global contra la pandemia, y uno más enfocado en lo que califica como “mal manejo” de la crisis sanitaria por parte del gobierno estadounidense, particularmente durante la administración de Donald Trump.
El documento sostiene que el virus “pudo haber aparecido antes” en Estados Unidos y cita como evidencia brotes de enfermedades respiratorias en ese país en 2019, patologías vinculadas al vapeo y antecedentes de fallos de seguridad en laboratorios que trabajaban con coronavirus. En ese sentido, insta a una investigación internacional sobre el posible origen del Covid-19 en territorio estadounidense.
China afirma haber cooperado con la Organización Mundial de la Salud (OMS) con “transparencia y sentido de responsabilidad”, y considera que Washington ha intentado desviar la atención culpando a Pekín y convirtiéndolo en “chivo expiatorio” ante la opinión pública mundial.
El informe aparece casi cinco meses después de que la OMS reiterara su petición a China para compartir datos sobre el origen del virus, señalando que aún no se puede descartar ninguna hipótesis, incluida la de una fuga de laboratorio en Wuhan, aunque la teoría más aceptada sigue siendo la del salto de animal a humano.