Foto.- Agencia Xinhua
El buque carguero “El Zapoteco”, de la Marina Armada de México arribó al Puerto de Acapulco, procedente de Manzanillo, Colima, con 14 mil 300 despensas en apoyo a las personas afectadas por la tormenta tropical “Manuel”.
La Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) informó que a bordo de la embarcación se transportaron también seis toneladas de oxígeno médico y siete mil latas de atún, que serán distribuidas por personal del Fondo de Desastres Naturales (Fonden) y brigadistas de la dependencia.
Destacó que toda la ayuda es descargada por elementos de la Marina y del Ejército mexicanos y se envía en helicópteros y camiones de volteo a las poblaciones que más resintieron los efectos de “Manuel”, en los 49 municipios afectados en Guerrero.
En este marco, la titular de la Sedesol, Rosario Robles, informó que comenzaron ya las labores de limpieza en Acapulco, toda vez que ha bajado considerablemente el nivel del agua.
“Por instrucciones del presidente Enrique Peña Nieto, cada uno de los delegados federales será responsable de una colonia, para coordinar los trabajos de limpieza de calles y viviendas por parte de las familias inscritas en el Programa de Empleo Temporal Inmediato (PETI)”, anotó Robles Berlanga.
Precisó que ya se realizan las encuestas casa por casa para conocer de primera mano las pérdidas materiales de las familias.
“Las plantas bajas de las casas quedaron en una situación muy mala y es ahora cuando todo esto empieza a aflorar; sin embargo, la prioridad aún es que la gente coma y luego iniciaremos la reconstrucción, tarea que será de largo plazo”, aseveró la funcionaria federal.
Por el momento, reiteró, fluyen los apoyos con alimentos y agua y se iniciaron los trabajos de las brigadas de salud, de levantamiento de censos y las labores de limpieza.
La secretaria de Estado dio a conocer que la víspera salieron helicópteros cargados con ayuda a la montaña de Guerrero, a donde había resultado difícil ingresar debido a las inclemencias del tiempo y a los cortes en los caminos.
“Sabemos que es ahí donde está la gente más necesitada, en las comunidades más pobres”, comentó.
Rosario Robles señaló que las autoridades se pudieron reunir con los habitantes de La Pintada, donde la montaña se vino abajo.
“Hemos acompañado y apoyado a esta comunidad, donde la gente no quería dejar sus casas por temor a perder sus bienes”, dijo.
Sin embargo, agregó, “los convencimos de que lo más importante es salvaguardar sus vidas y les garantizamos que el Ejército vigilará sus casas y pertenencias”.
