Más de 2 mil niñas y niños del municipio de Izúcar de Matamoros, cumplieron con una parte de sus sueños al lanzar sus globos para que a los Reyes Magos les llegaran sus cartitas con sus peticiones de regalos.

Se trata de una emotiva costumbre que rápidamente está ya convertida en tradición entre la niñez, viéndose cómo desde la víspera y desde muy temprana hora muchos niños acompañados de alguna persona adulta escogen su globo eligiendo el color más llamativo, seguramente para que cuando lo envíen al cielo con la cartita de dedicación a los Reyes Magos pidiendo el regalo de sus sueños, no se pierda en el camino.

Con sus caritas llenas de alegría e ilusión, la niñez izucarense se presentó en el zócalo para realizar el tradicional lanzamiento de globos. 

Personal del sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) del municipio, encabezados por su presidenta, Oliva González Sande de Gordillo, fueron los encargados de organizar este evento, que también incluyó la entrega de juguetes a colonias, barrios, comunidades y juntas auxiliares, y culminó con el “Desfile de Luces”.

Para que la niñez pasara una tarde agradable, el DIF municipal preparó diversos números artísticos, en donde se presentó el show del payaso “Zapatín”, el ballet de la academia “Princesitas”, además de que hubo actividades de convivencia y concursos.

Por último, Oliva González Sande de Gordillo, tomó el micrófono para explicarles acerca del origen de esta costumbre: “En muchos lugares los niños tienen la costumbre de hacer cartas a los Reyes Magos donde les expresan lo bien que se han portado durante el año, y así les indican los obsequios que quieren recibir el día de Reyes. Esta carta la ponen los niños junto con uno de sus zapatos, ya sea abajo del árbol de Navidad o a un lado del nacimiento. Muchos niños prefieren atarla con un cordón a un globo y lanzarla a fin de que su carta llegue al cielo junto a los Reyes Magos”.

La carta a los Reyes

Llegó la hora señalada, el reloj marcaba las 20:00 horas, tanto la presidenta del DIF, como su esposo, el presidente municipal, Carlos Gordillo Ramírez, tenían en sus manos unos globos con diversas peticiones relacionadas directamente con la seguridad, el progreso y el desarrollo de Izúcar; y fue entonces cuando los cientos de niñas y niños en forma uniforme soltaron cada uno de sus globos inflados con gas, pero llenos de anhelo, deseo, ánimo, confianza, fe y seguridad.

Durante varios minutos el cielo se vistió de colores, y conforme se alejaban los globos y se perdía el colorido, se acercaba el tiempo para que Melchor, Gaspar y Baltazar, llegarán a los hogares de cada uno de los niños con la finalidad de llevarles no sólo juguetes, sino lo más importante, momentos de inmensa alegría, júbilo, alborozo, algazara, animación, entusiasmo, felicidad, regocijo, diversión, esparcimiento, entretenimiento, gozo, regodeo, satisfacción y risa. 

Se presentó el momento en que los infantes, acompañados de mamá, papá, hermanos y demás familiares, se retiraron para dirigirse a sus casas, porque por fin, al siguiente día y a la misma hora, estarían llegando los Reyes Magos con una importante dotación de regalos, pero sobre todo con un cargamento de esperanza.