Con el argumento o excusa de que la obra de pavimentación de la carretera federal Puebla-Amozoc (sobre todo en el tramo que comprende de Amalucan a la junta auxiliar de Chachapa) está mal hecha, los trabajadores de las empresas constructoras se vieron obligados a remover el concreto hidráulico; esta había concluido desde hace un par de meses y la inversión total será de 190 millones de pesos (con IVA incluido).

En un recorrido que realizó Intolerancia Diario se constató que gran parte del concreto hidráulico, a la altura de la colonia Chapultepec, de la junta auxiliar de Chachapa, perteneciente al municipio de Amozoc, había sido removido por personal de las constructoras encargadas de dicho proyecto, una de ellas con el nombre de Corporativo de Pavimentos AC20.

De acuerdo con comerciantes del lugar, los trabajadores argumentaron que la obra estaba “mal hecha”, por lo cual tuvieron que romper el concreto hidráulico, esto luego de que durante las precipitaciones registradas durante septiembre y octubre la vía de comunicación se inundara, colapsando las coladeras y el drenaje.

Mientras que uno de los empleados, quien solo se identificó como José Luis, admitió que la obra estaba mal hecha, aunque después se retractó alegando que tuvieron que remover el concreto hidráulico porque había huellas de perro y de bicicletas sobre el pavimento.

Tras cuestionarle sobre la fractura que presenta la pavimentación en el tramo de Amalucan, dijo que ya tienen conocimiento de “estos detalles” de la obra, por lo cual tendrán que remover el concreto hidráulico para repararla.

Reconoció que el concreto hidráulico fue vertido sobre la antigua y de por sí deteriorada carpeta asfáltica, pero argumentó que esto no representaba ningún riesgo para la obra cuya duración se calcula en aproximadamente 20 años. 

Al insistirle que la carpeta asfáltica presentaba hundimientos y baches y que tras la colocación del concreto hidráulico, este no serviría para soportar el pesado tránsito vehicular, el trabajador optó por no dar más información a esta reportera e insistió en que los desperfectos seguirán reparándose.

De la constructora

Otro de los trabajadores de la obra, quien omitió su nombre por temor a represalias, dijo que una de las constructoras encargadas de dicho proyecto es el Corporativo Pavimentos AC20, la cual de acuerdo con una publicación emitida por el portal de noticias Central, se ha visto beneficiada con 7 obras estatales por un monto de 443 millones 634 mil 241 pesos, según los contratos de la Secretaría de Infraestructura (SI) signados entre 2011 y 2014.

Entre los contratos que se le adjudicaron a dicha constructora poblana se encuentran: la ciclopista de la Atlixcáyotl, la más cara del país por 62 millones 465 mil pesos; 1 puente elevado en esta misma zona por 76 millones 247 mil 948 pesos; y 2 pavimentaciones con concreto hidráulico por 249 millones 826 mil pesos.

Destaca también que el Corporativo de Pavimentos AC-20 es considerado una empresa fantasma debido a que solo tiene 10 empleados y no cuenta con página de internet, además, la constructora no tiene ningún contrato en otro punto de la República. De acuerdo con la lista de proveedores del gobierno morenovallista, el representante legal de corporativo es Jonathan Vázquez García y su perfil, como el de su empresa, no aparecen en internet.

Vicios ocultos

Por último, los comerciantes y familias que habitan sobre la carretera federal Puebla-Amozoc temen que el gobierno del estado que encabeza Rafael Moreno Valle sólo repare los tramos carreteros donde el concreto presenta fracturas y no obligue a las empresas constructoras a que entreguen una obra de calidad.

“Los mismos trabajadores admiten que la obra estaba mal hecha porque no retiraron el asfalto que estaba en pésimas condiciones, nada más están removiendo a aquellos tramos que presentan fracturas para poderla entregar y así se cumpla la famosa fianza y que después de un año de su entrega la constructora ya no se hace responsable”, aseveró Leonardo Hernández.

TÓMELO EN CUENTA

El Corporativo de Pavimentos AC-20 es considerado una empresa fantasma debido a que solo tiene 10 empleados y no cuenta con página de internet, además, la constructora no tiene ningún contrato en otro punto de la República. De acuerdo con la lista de proveedores del gobierno morenovallista, el representante legal de corporativo es Jonathan Vázquez García y su perfil, como el de su empresa, no aparecen en internet.

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“Los mismos trabajadores admiten que la obra estaba mal hecha porque no retiraron el asfalto que estaba en pésimas condiciones, nada más están removiendo a aquellos tramos que presentan fracturas para poderla entregar y así se cumpla la famosa fianza y que después de un año de su entrega la constructora ya no se hace responsable”
Leonardo Hernández