El secretario de las Comisiones de Energía, y de Hacienda y Crédito Público de la Cámara de Diputados, Javier Treviño Cantú, destacó que con la reforma constitucional en materia energética y sus leyes secundarias, se crea el marco jurídico para concretar un nuevo modelo mexicano de viabilidad energética del Siglo XXI.
En entrevista, el diputado del Partido Revolucionario Institucional (PRI) explicó que se estableció en la reforma constitucional un nuevo modelo que refiere las demandas y exigencias actuales para insertar a México en el mundo actual.
Es muy importante dejar claro que se trata de esto, porque tanto en el Senado como en la Cámara de Diputados estudiamos lo que está ocurriendo en las diferentes partes del mundo, como los diferentes países tienen sus modelos en materia energética, señaló.
“Nosotros definimos en esta reforma constitucional -en los tres artículos constitucionales-, este nuevo modelo mexicano de viabilidad energética para el siglo XXI”, expuso.
Treviño Cantú detalló que este nuevo modelo tiene el fin de logra cinco objetivos fundamentales, que tienen como base hacer de las empresas mexicanas en hidrocarburos y electricidad las más productivas del mundo, con uso de tecnologías innovadoras.
Explicó que el primer objetivo es transformar a Pemex y a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) en empresas productivas del Estado mexicano, eficientes y que dejen de ser agencias burocráticas del gobierno, para convertirse en organizaciones que realmente estén generando valor público para todos los mexicanos.
En segundo lugar, agregó, “definimos la manera cómo íbamos abrir el sector energético a la participación privada, nacional e internacional, con certeza jurídica, en beneficio de la nación, con reglas claras, regímenes de contratos, de producción compartida, de utilidades compartidas, de licencias y de servicios”, señaló.
El tercer fin de este nuevo modelo mexicano es fortalecer la capacidad reguladora del Estado, dando nuevas responsabilidades a la Secretaría de Energía, a la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) y a la Comisión Reguladora de Energía (CRE).
En cuarto lugar, “los legisladores definimos en esta reforma constitucional, que por tratarse el tema energético en su mayor parte de recursos no renovables, queremos que los beneficios de este reforma energética sean para esta generación de mexicanos, pero también para las futuras generaciones de mexicanos”, indicó el diputado federal por Nuevo León.
También destacó que en el tema de sustentabilidad se puso gran atención a la protección del medio ambiente, al crear una nueva agencia de seguridad industrial y protección del ambiente en materia de energía.
Agregó que el objetivo es lograr que todas las regulaciones en materia ecológica realmente tengan el objetivo de la protección del medio ambiente, de los recursos y la exploración y explotación de los recursos se lleve a cabo con las mejores tecnologías.
En quinto lugar, muy importante en este modelo mexicano, estamos dando una gran importancia a todos los temas relacionados con la transparencia, con la rendición de cuentas, con el Estado de derecho, porque todos los mexicanos tenemos derecho a saber qué está ocurriendo, cómo se van a licitar, cómo se van a firmar los contratos, en qué consisten los contratos y las disposiciones específicas, destacó.
Indicó que el tema de la transparencia va ser fundamental, por lo que en la reforma constitucional se definió una guía de implementación, que fueron los artículos transitorios y que hoy se reflejan en las iniciativas que se analizan tanto en el Senado como en la Cámara de Diputados para concretar las leyes secundarías.
Puntualizó que con el anterior modelo no estaba funcionado, “porque la época, la era del petróleo se había agotado para México, ahora era importante explorar en las profundidades del Golfo de México y en los nuevos yacimientos de lutitas, en la formación geológica de lutitas en el noreste del país, a fin de que podamos aumentar la producción”, apuntó.
Señaló que se quiere dar un viraje al sector energético con la apertura a la inversión privada nacional e internacional, así como con el uso de nuevas e innovadoras tecnologías, para hacerlo más productivo y competitivo, además de que ese urgente que México entre a la revolución tecnológica.
Apunto que es urgente entrar a esta revolución tecnológica para poder tener disponibilidad, confiabilidad y bajos costos en la oferta de gas natural, para la planta industrial mexicana y también para la generación de energía eléctrica.
“De tal manera que podamos bajar los costos de la energía eléctrica y dar resultados, sobre todo con beneficios concretos a los mexicanos pronto. Ante esta revolución tecnológica internacional teníamos que entrar rápidamente con el nuevo modelo mexicano y lo estamos haciendo con esta legislación secundaria, para instrumentar la reforma constitucional”, concluyó.