En un mensaje a medios, confirmó la muerte de 52 reos del penal y 12 heridos, cinco de gravedad, durante un enfrentamiento ocurrido en el interior del centro penitenciario entre dos grupos criminales.

El mandatario estatal descartó que se haya registrado fuga de reos y el uso de armas de fuego.

Detalló que los hechos iniciaron alrededor de las 23:30 horas de ayer, cuando se registró una riña entre internos del Centro de Readaptación Social, ubicado en la colonia Valle Morelos, en el noroeste de la capital regiomontana.

“El conflicto partió de una disputa entre los grupos liderados por Jorge Iván Hernández Cantú, alias “El Credo”, y Juan Pedro Saldívar Farías, “El Z-27”, dijo ante medios de comunicación en Palacio de Gobierno.

Tras precisar que los hechos violentos se circunscribieron a los módulos ambulatorios C-2 y C-3, señaló que “estamos viviendo una tragedia derivada de la situación tan difícil en que se encuentran los centros penitenciarios”.

Añadió que durante los disturbios, internos prendieron fuego a bodegas de víveres, sin afectar áreas de dormitorios.

Rodríguez Calderón aseguró que tras la intervención de autoridades penitenciarias, alrededor de las 1:30 horas la situación fue controlada al interior del penal del Topo Chico, en funciones desde 1947 y que alberga a 3 mil 800 reos.

Al mismo tiempo, agregó, se tuvo el apoyo de elementos del Ejército Mexicano, Secretaría de la Marina Armada de México y Policía Federal, para reforzar la vigilancia en el centro penitenciario.

“Queda descartada la existencia de fuga alguna o intento de ésta, así como el uso de armas de fuego”, subrayó.

Dentro de los protocolos, sostuvo, se aplicó un cerco de seguridad alrededor del penal del Topo Chico y los restantes del estado, como el de Apodaca y Cadereyta.

“De las primeras indagatorias realizadas por la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), se puede confirmar el fallecimiento de 52 personas y la existencia de 12 heridos, que requieren atención hospitalaria, entre ellos, cinco de gravedad”, abundó.

El ejecutivo estatal enfatizó que todos los muertos y heridos son del sexo masculino, por lo que no hay mujeres o niños que hayan sufrido daños por la violencia suscitada.

Indicó que el proceso de identificación prosigue por parte de la Dirección de Servicios Periciales de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), por lo que pidió esperar a datos fidedignos para conocer identidades de víctimas.

Señaló que se dará atención a familiares de víctimas, a través del sistema DIF, secretarías de Salud y General de Gobierno.

Rodríguez Calderón mencionó que para el deslinde de responsabilidades, pedirá la presencia permanente de personal de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH).

Sin responder a preguntas, y acompañado de funcionarios estatales, el gobernador dijo que él toma control del asunto y conforme surjan más datos, se irán dando a conocer a la opinión pública.

De los cinco heridos graves y trasladados al Hospital Universitario, identificó a cuatro: Oscar Reynaldo Cázares González, Axel Lobato Mendoza, Jorge Alberto Aguirre Treviño y Hugo Roberto Escobar Rincón, pues el resto de los lesionados fueron atendidos en el mismo penal.