Tekandi Paniagua, jefe de prensa de la cancillería guatemalteca, precisó que está “pendiente la hora” en que Duarte será entregado por el gobierno de Guatamala al de México.

 

Paniagua tampoco reportó donde se realizará la entrega ni si Duarte viajará a México en un avión del gobierno mexicano.

Por lo general, la Procuraduría General de la República (PGR) acostumbra enviar una de sus aeronaves al país que entrega, para que el requerido sea trasladado a México.

El político, capturado a solicitud de México con fines de extradición en la noche del pasado 15 de abril en el suroccidente de Guatemala luego de seis meses en fuga, permanece preso desde el 16 de ese mes en Matamoros, un centro penitenciario de máxima seguridad para prisioneros de alta peligrosidad y relevancia que funciona en un cuartel militar capitalino.

El pasado 7 de julio, el ministro guatemalteco de Gobernación, Francisco Rivas, instó a México a acelerar la extradición de Duarte.

Ya la responsabilidad de recibirlo y llevarlo ante la justicia mexicana es de los mexicanos. La responsabilidad de los guatemaltecos ha concluido. Nosotros estamos esperando que ellos (los mexicanos) nos digan en qué momento quieren llevárselo. Esa es la situación real de él”.

Ante dos instancias judiciales de la capital guatemalteca—los tribunales Quinto y Tercero y ambos de Sentencia Penal, Narcoactividad y Delitos contra el Ambiente—, Duarte aceptó ser extraditado a México. Ante el Tercero lo hizo el martes de 27 de junio anterior por los presuntos delitos estatales en su contra y en el Quinto se allanó a la extradición el pasado martes 4 de julio por las acusaciones de supuestos cargos federales.

El político, de 43 años, aceptó ser extraditado a suelo mexicano para someterse a la justicia por los supuestos cargos federales de delincuencia organizada y operaciones con recursos de procedencia ilícita que habría cometido como gobernador de Veracruz, de 2010 a 2016, y los presuntos cargos estatales en ese estado de tráfico de influencias, incumplimiento de deber legal, abuso de autoridad, peculado y coalición.

Los dos tribunales notificaron de esos hechos a la Secretaría General de la Corte Suprema de Justicia de Guatemala, que el jueves 6 de este mes remitió los expedientes a la cancillería y esta, a su vez, los trasladó a la embajada de México en la capital guatemalteca en la tarde de ese mismo día. Los tribunales dejaron a Duarte a la orden de la cancillería guatemalteca, por lo que la gestión de entrega del político a México es un proceso de coordinación administrativa entre ambos gobiernos.

El ministro Rivas reveló el viernes anterior que la embajada mexicana le informó que el gobierno de México debe cumplir con diversos trámites en ese país antes del traslado del exgobernador y recibir unas autorizaciones judiciales. Guatemala está al pendiente de que “eso se haga lo más rápido posible para que él salga de territorio guatemalteco”.

Filtran audio entre Duarte y Abdalá

En pasados días, se filtró a través de redes sociales un audio en el que, presuntamente, Javier Duarte sostiene una conversación telefónica con Tarek Abdalá, extesorero de la guberatura de Duarte, en la que este último reprocha al hoy diputado federal que de no resolver en breve “el tema” pendiente con el PRI nacional, él mismo tendrá que buscar a todos y darle solución.

Me están hablando del PRI nacional porque quedé de enviarles los recursos desde hace dos días, y no les ha llegado nada. Háblale a Iván (en alusión al excontralor general del estado, Iván López Fernández y recientemente candidato perdedor a la alcaldía de Emiliano Zapata). Son mil, no es cualquier chingadera, puedo entender que se tarde, pero no que no llegó, que sí salieron de aquí las cajas de huevo, si no me van a hacer de chivo los tamales (sic)”, dice un irritado Duarte.

Ahora resulta que lo voy a tener que buscar yo. Si no estoy pintado, chingao”, explota Javier Duarte.

Hoy el fiscal general Jorge Winckler Ortiz aclaró que los audios de Tarek Abdalá y de Javier Duarte, no tienen validez como pruebas, sin embargo, refirió que en ambos casos ya se abrieron carpetas de investigación para tratar de ahondar en el asunto.

Winckler aseguró que hay más delitos y deslinde de responsabilidades en contra de Duarte de Ochoa, los cuales serán presentados una vez que el exmandatario veracruzano pise una prisión mexicana.