Las comisiones unidas de Relaciones Exteriores y Relaciones Exteriores para América del Norte del Senado ratificaron por unanimidad de los 13 integrantes, a Martha Elena Bárcena como embajadora de México ante el gobierno de Estados Unidos.

Durante su comparecencia con los senadores, la diplomática afirmó que México jamás aceptará ser un tercer país seguro para los migrantes, como lo solicitó Estados Unidos y esto se le ha repetido una y otra vez a la administración de Donald Trump.

La futura embajadora en Washington dejó en claro que el hecho de que en esta ocasión el gobierno mexicano acepte recibir a los migrantes centroamericanos que soliciten asilo en suelo estadunidense, es por razones estrictamente humanitarias.

Bárcena Coqui sostuvo que en los hechos, al adoptar de forma unilateral la decisión de enviar a México a esos migrantes de Honduras, Guatemala y El Salvador, principalmente, el gobierno de Estados Unidos está reconociendo la inoperancia de su marco legal en materia de asilo.

“Es una situación muy compleja para México porque es evidente que las leyes de asilo en Estados Unidos no están funcionando; entonces, lo que yo he discutido de manera informal con algunos funcionarios americanos es que les digo: nos están pidiendo a México que les resolvamos la inoperancia de sus leyes, y por qué lo estamos haciendo, por razones humanitarias, sobre todo, porque están en los valores intrínsecos de la historia de México”.

La embajadora de México reconoció por otra parte, que los consulados mexicanos requieren de mayores recursos, independientemente de que se corrija lo que el canciller Marcelo Ebrard llamó "error de dedo" de reducirles su presupuesto en un 80 por ciento.

“Sí vamos a requerir mayores asignaciones presupuestales federales porque los recursos de ingresos consulares vienen disminuyendo consistentemente. Y por qué vienen disminuyendo, porque había muchos trámites que se hacían en los consulados y que se tenían que pagar en los consulados y ahora se hacen por internet o que se hacen directamente en México, y entonces los ingresos consulares eran una de las fuentes de mantenimiento del funcionamiento de los consulados”, señaló.

Martha Bárcena informó también que se hará una revisión completa de los programas y mecanismos de cooperación entre ambos países, incluidos la Iniciativa Mérida y la Alianza para la Prosperidad, con el fin de analizar cuáles funcionan.

En un conteo preliminar de la cancillería, reveló, existen más de 320 mecanismos de cooperación México-Estados Unidos, aunado a las reuniones intergubernamentales que suman 700 esquemas de colaboración, sin que se le dé un seguimiento a sus resultados.

La diplomática adelantó que entre sus principales labores estará combatir las campañas anti mexicanas que impulsan los sectores más conservadores del vecino país, para lo cual buscará de inmediato diálogo con todas las dependencias del Ejecutivo, el Legislativo, las autoridades estatales y locales, la sociedad civil estadunidense, la academia, el sector privado, los medios de comunicación y el mundo de la cultura, para difundir la importancia de las contribuciones que han hecho los mexicanos al desarrollo de la economía de Estados Unidos.