Norma Irene de la Cruz Magaña, la recién elegida consejera electoral del Instituto Nacional Electoral (INE), habría incumplido con requisitos señalados por la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales, para ocupar ese cargo.
La ley exige ser ciudadano por nacimiento, no adquirir otra nacionalidad y haber residido en México durante los últimos dos años, salvo la ausencia en servicio de la República por un tiempo menor de seis meses.
Apenas en junio de 2018, la hoy consejera del organismo formó parte de los “visitantes extranjeros” que fungieron como observadores internacionales en la elección federal de ese año.
De acuerdo a constancias del INE, Irene de la Cruz fue acreditada como “consultora” en Reino Unido. Además, la consejera está casada con un británico, por lo que tuvo que entregar documentación para acreditarse como “visitante extranjero”, lo que implicaría que tiene doble nacionalidad.
En 2015, también representó a Reino Unido como observadora electoral en los comicios locales de Ucrania. En aquella ocasión, uno de los requisitos para participar en esa observación era acreditarse como ciudadana del país que representaba.
Lo que respecta a la residencia en el país durante los últimos dos años, estaría en entredicho, ya que su currículum indica que desempeñó en México data de 2000-2001, como asesora del entonces senador Rutilio Escandón.
“A pesar de que toda mi experiencia ha sido en el exterior, en los últimos 15 años nunca he dejado de seguir el proceso político y la evolución del sistema electoral mexicano”, dijo el pasado 23 de julio al ser entrevistada por diputados, como parte del proceso de selección.
Con información de Reforma