Una pifia más del equipo del gobernador Rafael Moreno Valle provocó que los diputados en comisiones frenaran la solicitud de un nuevo empréstito para Puebla.


Los integrantes de la Comisión de Hacienda Pública del Congreso local mostraron su inconformidad porque el personal de la Secretaría de Finanzas no despejaron sus dudas, sobre todo no quedó en claro el monto máximo que podría adquirir el estado, los presidentes municipales y los organismos públicos descentralizados, ya que en un principio se dijo que el crédito sería hasta por 3 mil millones de pesos pero al final trascendió que podría superar los 10 mil millones.


El presidente de la  Comisión de Hacienda, Lauro Sánchez López, aclaró que aún hay dudas en la propuesta que envió el gobernador, pues aún no se precisa el tiempo en el que se pagaría la deuda.


Otro de los temas que detuvieron la discusión, dijo, fue que la Secretaría de Finanzas no dio a conocer el estado de las deudas que puedan tener los 217 presidentes municipales y los organismos descentralizados. "Son de las ambigüedades que hay en este tema, entonces solicitamos que se precisara esta información".
Los diputados, en lugar de aclarar las dudas se confundieron más con la comparecencia de Eduardo Carmona Rodríguez, encargado de despacho de la Dirección de Deuda Pública de la Secretaría de Finanzas, quien no supo explicar si el decreto sólo autoriza una deuda hasta por 3 mil millones de pesos o si hay otro monto adicional basado en recursos provenientes de programas federales.


El que también se mostró complacido con el retraso de la aprobación de la deuda fue el priista Enrique Doger Guerrero, al señalar que el gobierno morenovallista tiene muchas dudas que aclarar, ya que en el decreto que envió la semana pasada no especificó el monto total del endeudamiento al que pueden recurrir.