Myriam Arabian Couttolenc evitó emitir comentarios sobre el curso de su defensa. Entre hermética y con una evanescente sonrisa sólo dijo:
“No puedo hacer ningún comentario…”
Entre imperturbable, dando muestras de serenidad, en esa extraña aleación de duda, Myriam Arabian Couttolenc dejó el ostracismo de su blog, para encarar el periplo de la orden de aprehensión en contra y demostrar su inocencia en las acusaciones de peculado presentadas en 2009 ante la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (FEPADE), la secretaria de Desarrollo Social con licencia, acompañada de su abogado, acudió a las instalaciones del PAN municipal para realizar las diligencias respectivas a cargo de la jueza Rosaura Rivero Saucedo.
A piedra y lodo llevaron a cabo las diligencias, con sigilo.
Luego de una espera de una hora, con insistencia los reporteros buscaron sacarle a Arabian Couttolenc una declaración, y cuyo vía crucis ha generado una oleada de comentarios sobre la procedencia y la finalidad de la denuncia.
La secretaria con licencia abordó su vehículo, un Bora negro estacionado a la entrada de las instalaciones del PAN municipal.
Algunos osados metieron sus grabadoras por la ventanilla para cuestionarle a la funcionaria si solicitará una prórroga de la licencia por dos años.
Su abogado, Carlos Requena Ochoa, dijo a los medios de comunicación que Arabian es inocente, que continúan las diligencias y que corresponde al juez evaluar las pruebas correspondientes.
“Myriam Arabian es completamente inocente de cualquier acusación. Arabian no cometió absolutamente ningún delito. La jueza es la única que puede decir y valorar las pruebas.”
Ni Arabian ni su abogado, a pesar de la insistencia de la prensa expresaron si pedirá una ampliación de su licencia.
Arabian quitó la mirada de las grabadoras. Subió la ventanilla de su coche. El vehículo avanzó dejando en el aire cómo van las diligencias respectivas.
Arabian Couttolenc se despidió de la prensa con un ligero movimiento de su mano. Una tenue sonrisa se le dibujó en el rostro.
Los antecedentes
María de Lourdes Ecatl Zempalteca y Anel Fernández Zempoalteca acusaron a Miriam Arabian Couttolenc que el pasado 5 de mayo de 2009, cuando pedía el voto como candidata a diputada por el PAN, coaccionó el voto a cambio de acceso al programa federal Oportunidades, según consignan las averiguaciones previas AP/PGR/PUE/PUE-IV/425/09 y AP/PGR/PUE/PUE-IV/426/09.
Según las denunciantes, la entonces candidata panista intentó persuadir el voto a favor del blanquiazul en el proceso de 2009 condicionando su integración al programa Oportunidades, la inscripción al proyecto “Mujeres Emprendedoras” además de entregarle un litro de leche Liconsa a cada una.
La denuncia fue interpuesta ante la FEPADE y apoyada por el Partido Revolucionario Institucional (PRI), que actualmente se deslinda del caso.
El pasado 14 de diciembre de 2009 Arely Reyes Terán, agente del Ministerio Público de la Federación apeló ante el Tribunal Unitario del Sexto Circuito la resolución del juez de Distrito que negaba la orden de aprehensión.
Y para el 18 diciembre de ese mismo año, el magistrado unitario de circuito Carlos Loranca Muñoz revocó la resolución del juez de Distrito y ordena la liberación de la orden de aprehensión contra la panista.
El pasado lunes 23 de mayo la secretaria de Desarrollo Social presentó su declaración inicial, donde negó los hechos que mencionan las denunciantes, ya que en la fecha referida nunca realizó campaña pues había una veda electoral y se encontraba en la planeación de su campaña.
En su declaración del pasado 23 de mayo, Myriam Arabian refutó la denuncia diciendo que posee propósitos políticos-partidistas; que las dos denunciantes mienten y fabricaron pruebas en su contra como parte de la guerra sucia de la campaña electoral de 2009.