A seis días de que los ciudadanos del país elijan presidente de la República y la conformación del Congreso de la Unión, el rector del campus Puebla de la Universidad Iberoamericana (UIA), David Fernández Dávalos, lanzó un llamado a todos los partidos políticos y candidatos inmersos en la contienda electoral, a “jugar limpio” y respetar las reglas de la democracia mexicana, “tienen que poner por delante los intereses de la patria, la civilidad y la paz”.

Dijo que todos los actores políticos que están en la contienda federal tienen la responsabilidad social de actuar con honestidad, con verdad y con respeto a la normatividad que prevalece en la sociedad, para garantizar un evento tranquilo y sin contratiempos que afecten la estabilidad del país. Para el administrador central, el proceso electoral está competido y las campañas se presentan cerradas, por eso es natural que los comicios sean difíciles porque son demasiadas cosas las que están en juego, “el 1 de julio se dirime el futuro del país y todos los ciudadanos deben actuar con responsabilidad, respetar la normatividad existente”.

Los intereses que están en juego en la contienda electoral que culmina el 1 de julio son dramáticos, por eso es comprensible que haya “golpes bajos”, aunque ante esa circunstancia no se vale calumniar y jugar con mentiras, “eso es lamentable que exista en el país”. Además, el ambiente político que prevalece en el país es tenso y con el paso de los días se crispa cada vez más, sin embargo no se valen las mentiras y las calumnias porque generan condiciones difíciles y de confrontación en el ámbito nacional.

Fernández Dávalos dijo que todos los actores políticos y los ciudadanos de México deben entender que si quebrantan las reglas del “juego limpio” todos lo lamentarán durante muchos años, por eso insistió que debe ponerse por delante la paz, la convivencia y el juego democrático, “eso es lo que tenemos que preservar, porque si no lo hacemos así lo vamos a lamentar en el futuro inmediato”. El rector percibe que el proceso electoral del país es complicado, por lo que el papel de la autoridad electoral siempre será controvertido, sin embargo es temprano para debilitar al organismo electoral, “lejos de debilitarlo, todos debemos fortalecerlo”.