El diputado del Partido Revolucionario Institucional (PRI) Gerardo Mejía espera una “ola” de amparos en contra de la reforma a la Ley del Agua, la cual se aprobó la semana pasada con los votos del PAN y sus partidos aliados.

El legislador del PRI descartó que exista una división en la bancada priista y la “línea” nacional del PRI que pidió que se votarán en contra la aprobación de los PPS para 17 municipios del estado y la aprobación de la Ley del Agua que contempla procesos de concesión del servicio a particulares y que se le quita al Congreso su facultad para fijar las tarifas de los servicios del agua.

“Ellos tendrán sus razones y yo las respeto”, señaló el diputado del PRI.

Además, el legislador del Partido Revolucionario Institucional aseveró que, paradójicamente, los mismos diputados que votaron a favor de la Ley del Agua, la cual permite la concesión de diversas funciones y procesos de los sistemas operadores de agua fueron los mismos legisladores que aprobaron las cuentas públicas de los sistemas operadores. Cuando en la sesión de la semana pasada, los legisladores adujeron que votaban a favor de la Ley del Agua porque el SOAPAP estaba en quiebra. Mejía pone en tela de juicio tal afirmación.

“Imagínate, los propios diputados que señalan que hay un desfalco en el SOAPAP son los mismos que aprobaron sus cuentas públicas.” Además, el diputado del PRI señala: “Yo no había llegado cuando se aprobaron esas cuentas públicas”.

El diputado del PRI afirmó que todavía su partido está revisando el tema: “Aún estamos por analizar cuál es el paso que va a tomar la administración estatal, una determinación, una vez que generen esa acción vamos a ver cuál es la medida legal que vamos a poner en ese respecto.”

—¿Hubo “traición” de los diputados del PRI al emitir su voto, habían dicho que iban a ir en contra? —se le cuestionó al diputado del expartidazo tricolor

—No me atrevería yo a emitir un comentario sobre la decisión de mis compañeros. Ellos tendrán que emitir y sabrán su postura. Yo anuncié esa mañana que votaría en contra y subí a tribuna en el tema de PPS y del agua, y vote en contra.

—¿Hubo amenazas para los legisladores del PRI?

—No, para nada —explicó el diputado tricolor—. La verdad es que cada quien votó de acuerdo a sus convicciones y a lo que ellos creían. Yo voté en contra del tema de la Ley del Agua y subí a tribuna y en contra de los PPS, porque no tenemos ni idea de los montos.

“Yo voté en contra de los PPS porque nadie sabe ni cuánto costaron ni cuánto van a costar. Ningún diputado sabe el monto de los PPS, no sabe el monto de la propia deuda que va a adquirir cada municipio.”

El diputado del tricolor añadió que posiblemente, cuando haya un incremento en las tarifas se desatará una oleada de amparos en contra de la Ley del Agua.

“El gobierno debe ser más sensible. Las leyes deben ser para el beneficio de los ciudadanos”, sentenció el legislador Gerardo Mejía.

**
Por otro lado, expresiones de la izquierda poblana se han mostrado en contra de las modificaciones aprobadas el jueves pasado en sesión extraordinaria por el Congreso de Puebla. Los diputados aprobaron con 28 votos a favor y 9 en contra el dictamen emitido por la Comisión de Medio Ambiente, por el que se reforma la fracción IV, VII y VIII del artículo 31 y se adiciona la fracción IX al artículo 31 y el 118 Bis, todos de la Ley del Agua para el Estado de Puebla.

Por ejemplo, la izquierda poblana, a través del representante en Puebla de Izquierda Democrática Nacional (IDN), Jorge Méndez, se externó en contra de la reforma a la Ley del Agua y señaló que “abanderaran” su rechazo a dicha iniciativa por dañar la economía de los poblanos e ir en contra de diversos ordenamientos internacionales que señalan que el derecho al agua es un derecho humano fundamental.

En el mismo sentido, pero por separado, se expresó la activista Argelia Arriaga, quien señaló que colectivos de izquierda revisarán dicha iniciativa.

**
La postura que emitió el Comité Directivo Estatal del PRI para sus legisladores locales y los regidores de la capital fue el rechazo hacia cualquier iniciativa proveniente del gobernador del estado que genere un mayor endeudamiento en las administraciones municipales, porque medidas como la aprobación de los Proyectos de Prestación de Servicios (PPS) para 17 municipios del estado de Puebla y las modificaciones a la Ley del Agua limitan los márgenes de maniobra en el tema de los servicios públicos.

El debate al interior del PRI fue conducido por el delegado presidente del tricolor, Pablo Fernández del Campo, quien planteó que la directriz de su partido es ir en contra de dichas medidas porque dañan la economía de los ciudadanos, por lo que desaprobarlas es un acto de responsabilidad social.

“Las decisiones que se toman tanto en el seno de la dirigencia estatal como con su representación en el Poder Legislativo siempre están apegadas a derecho. Más importante aún, tienen como fin último el beneficio de la sociedad”, señaló Fernández del Campo el jueves pasado, subrayando que el tricolor, por naturaleza, es un interlocutor social. De ahí que con el gobierno del estado ni sana lejanía ni insana cercanía, sólo una relación meramente institucional.

Pero la postura de la dirigencia del expartidazo contrastó con lo que sucedió en la sesión extraordinaria. Durante la sesión extraordinaria, esperada y pospuesta durante varias semanas, en la iniciativa para la privatización de los sistemas operadores de agua en el estado de Puebla de los 14 diputados que la integran, tres diputados mejor se ausentaron y dos votaron a favor de la iniciativa para permitir la privatización de los sistemas operadores de agua en el estado de Puebla

Los diputados que votaron a favor de la iniciativa fueron: Ramón Felipe López Campos y Juan Manuel Jiménez García.

Los diputados ausentes: Zenorina González, Elvia Suárez e Iván Conrado Camacho, quienes de plano aplicaron la de no asistir a la sesión plenaria. En la comodidad de la ausencia para ir en contra de la “línea” de su partido.

Esto, a pesar de que los diputados del expartidazo señalaron que la iniciativa de ley era lesiva a la sociedad e iba en contra del arreglo constitucional.

El pleno del Congreso local, en sesión extraordinaria, aprobó la iniciativa para privatizar los organismos operadores de agua potable en el estado, con la friolera de 28 votos a favor y apenas nueve en contra.

El presidente de la Junta de Coordinación Política, Mario Riestra Piña, amarró la aprobación de la iniciativa con el coordinador de la bancada tricolor, Ernesto Leyva; y aprovechó las diferencias y protagonismos en la bancada del expartidazo.