Personal administrativo de la Procuraduría informó que desde hace dos semanas está siendo citado al corralón de Agua Santa, al sur de la ciudad, en grupos de cinco, el día en que se presentan a trabajar. El motivo es que participen en el proceso de “chatarrización” que se lleva a cabo en el lugar.
Pidiendo que se reserven sus nombres por temor a perder su trabajo, aseguran que la orden llega presuntamente del director administrativo, Roberto Velarde, toda vez que a la dependencia le fue facilitada maquinaria pesada para compactar las unidades que se encuentran en el lugar.
El personal, según señalaron, llega con ropa para atender trabajos de oficina, sin embargo, los llevan al corralón que en época de lluvias tiene hierba crecida y lodazales en diversos puntos.
Sin la experiencia para ese trabajo, el personal —que estudió Licenciatura en Sistemas o incluso con Maestría en Derecho— tiene que ayudar en el retiro de neumáticos u otros elementos, para apoyar la compactación de los vehículos, y en caso de que se nieguen a hacerlo saben que podrán ser despedidos.
El trabajo —según dijeron— se realiza de lunes a sábado en condiciones precarias, sin importar que se presente la lluvia, ya que deben de seguir trabajando para cumplir con su jornada laboral.
Asimismo, revelaron que hay fauna nociva, como ratas de gran tamaño, demás de que han encontrado víboras en el lugar.
De acuerdo con los señalamientos, el director Roberto Velarde presuntamente se ha negado a contratar a un grupo de cinco personas con conocimiento básico de mecánica automotriz para que realice el trabajo de manera eficiente, ya que —dicen— el argumento es la falta de recursos económicos para hacerlo, además de que las plazas se encuentran “congeladas” hasta nueva orden.
Asimismo, indicaron que sigue el despido de personal al interior de la Procuraduría, además de una reducción del salario; e incluso hay personal con nivel de licenciatura que percibe mil 600 pesos a la quincena, entre ellos se encuentran quienes laboran en el área de Violencia Intrafamiliar, así como la gente de Delitos Sexuales.
También señalaron que ahora, además de manejar los sistemas computacionales o cuestiones legales, se han convertido en obreros, y todo por un mismo sueldo.
Los inconformes indicaron que los agentes ministeriales no tienen día de descanso y sus jornadas son de 9 a 4 horas debido a que se carece de personal por los despidos de hubo con el pretexto de que no pasaban las pruebas de confianza, a pesar de que algunos sí las aprobaron.
Finalmente, indicaron que la maquina compactadora de los vehículos puede ser vista desde la calle, así como el personal que la opera, para demostrar que no se trata de personal especializado
Necesaria la limpieza
La fuente consultada aclaró que es necesario liberar los espacios del corralón, donde hay vehículos que tienen más de 15 años abandonados pues sus propietarios decidieron dejarlos ahí en vez de pagar el derecho de piso.
Sin embargo, insistieron en que con la contratación de personal adecuado para la destrucción de las unidades se podría avanzar y no descuidar el área administrativa, donde se atiende a los ciudadanos.
El corralón —reconocieron— se encuentra ocupado casi al doble de su capacidad y los vehículos tienen que se apilados uno encima de otro.
Sin control, los corralones
El 31 de julio de 2012 se denunciaron, por medio de una nota firmada por el reportero Jorge Castillo, las irregularidades de algunos corralones en Puebla.
“Altos mandos de la Secretaría de Seguridad Pública Estatal (SSPE) fueron denunciados por un subalterno por actos de corrupción, como pedir dinero para trabajar y ordenar el robo de un motor de un automóvil estacionado en el corralón.
”Según documentos —en poder de Intolerancia Diario—, las autoridades denunciadas se desempeñan en la Dirección de Vialidad del estado, dependiente de la SSPE, quienes presuntamente acosan al denunciante luego de que los acusara.
”Inclusive, existe un oficio donde piden se arregle una patrulla en un presunto taller mecánico, pero realmente es la dirección del corralón, ubicado en la localidad de Zacatepec, al oriente de la entidad, donde se cambiaría un motor.
”Fuentes de Vialidad indicaron que la situación desnuda que las pruebas de confianza no han sido bien aplicadas a algunos altos mandos, en los tiempos en que operó Mauricio Tornero, al frente del Consejo Estatal de Coordinación del Sistema Nacional de Seguridad Pública (CESP)”.