Cerca de 200 amparos interponen en juzgados federales concesionarios, para protegerse ante la instalación de la línea 2 de la Red Urbana de Transporte Articulado (RUTA), que circulará en la 11 Norte-Sur.
Así lo revelaron algunos transportistas —quienes por temor a represalias del gobierno estatal pidieron a Intolerancia Diario el anonimato— al tiempo de señalar que se están buscando proteger y que no pase lo mismo con sus colegas de RUTA.
Indicaron que por lo mismo se han interpuesto más de dos centenares de solicitudes de juicios de amparo, para evitar que les vayan a quitar sus concesiones ante el cambio de derroteros, ya que sus unidades se convertirán en alimentadoras del metrobús.
Entrevistados en algunas de sus bases, señalaron que viven “tiempos de miedo y zozobra”, ya que aunque la autoridad les ha prometido que seguirán en el proyecto, el ejemplo de la línea 1 los ha puesto a temblar.
Aseguran que no tienen la menor idea de lo que implica el proyecto y sólo se han mantenido con la promesa de palabra de las autoridades de la Secretaría de Transportes (ST) que serán incluidos, pero no hay certeza.
Luego de lo sucedido a los concesionarios de la línea 1, quienes ya no forman parte de la administración del RUTA, aunque realmente estaban ya protegiéndose con los amparos desde hace semanas previendo una situación similar.
Aunque confían en que el sistema RUTA de la 11 Sur sea un éxito por el alto número de pasajeros con los que cuenta —el mayor de la ciudad—, se preparan legalmente para evitar cualquier sorpresa.
Señalaron que se rumora que la licitación para la línea troncal, la cual se lanzó inclusive internacionalmente, tiene ganador y será la empresa Estrella Roja, por lo que se conforman con que se respeten sus concesiones con las alimentadoras.
“Siguen las negociaciones, aunque la Secretaría de Transportes se mantiene hermética en la información crucial, como la de cómo se cubrirán los derroteros de las rutas alimentadoras que van a ser las que nos toquen”, dijeron.
“Ahora nada nos asegura que nos cumplirán las promesas que seguiremos trabajando, luego de lo que le hicieron a compañeros de la línea 1, por eso nos tenemos que proteger, estamos a tiempo”, dijo un concesionario.
Señalaron que se mantendrán no sólo expectantes, sino estarán pendientes de sus procedimientos jurídicos, pero sin protestas, ya que luego de una manifestación de hace un año, el 5 de julio de 2013, aprendieron que no es la vía, sino mejor la legal.
En dicha protesta que generó conflicto vial por varias horas al sur de la ciudad, fueron desalojados con la fuerza pública y detenidas 15 personas, quienes ahora están bajo un proceso penal desde entonces.
Hace más de un año se presentó oficialmente la nueva línea del metrobús que tendrá un costo de más de 2 mil millones de pesos, por lo que desde entonces se negocia con transportistas sobre su papel en este proyecto.
Las rutas
En marzo de 2013, mediante una respuesta a solicitud de información de Intolerancia Diario, la ST afirmó que no desaparecerá ninguna de las rutas de transporte público que circulan actualmente por la 11 Norte-Sur.
Respondió que sólo cambiarán de derrotero o los concesionarios se convertirán en inversionistas del metrobús y algunas en alimentadoras de la nueva línea.
Sin embargo, la Asociación Mexicana de Transporte y Movilidad (AMTM) señaló que es imposible que sigan operando, ya que se generaría un gran conflicto vial, por lo que deben desaparecer.
La dependencia estatal, en respuesta a la solicitud de información, aseguró que no habrá desapariciones de rutas como las que hubo en la línea 1 del metrobús, lo que generó desempleo y diversas protestas.
“(…) las rutas se reestructuraran, lo que implica que ninguna ruta saldrá de circulación”, señala el documento oficial de la ST.
Para el proyecto de la línea 1 del metrobús Chachapa-Tlaxcalalcingo desaparecieron las rutas 32, 32 A y 36, entre otras, con sus respectivas unidades, las que se convirtieron en alimentadoras.
En algunos casos, como las rutas 32 y 32 A, ni siquiera fue cambiado su derrotero ante presiones de usuarios, por lo que hasta la fecha siguen haciendo el mismo camino de las desaparecidas.
Tras un recurso de revisión en la Comisión de Acceso a la Información Pública (CAIP), la dependencia entregará un alcance de respuesta bajo el oficio UAAI.ST.176/2013, donde aseguró que no habrá desapariciones de rutas de transporte público.
“Como puede apreciarse las rutas se reestructurarán, lo que implica que ninguna ruta saldrá de circulación”, señala el documento de respuesta, a grandes rasgos.
Posteriormente, señala la respuesta firmada por María Alejandra Martínez Rubí, titular de la Unidad Administrativa de Acceso a la Información de la ST, que la reestructuración consiste en: “Las rutas de incidencia directa son aquellas donde la mayoría de sus usuarios efectúan ascensos o descensos dentro de la Cuenca.
”Los actuales concesionarios de estas rutas conformarán una sociedad mercantil que operará el servicio con autobuses de gran capacidad, tanto sobre los dos corredores troncales como sobre las vialidades transversales a los mismos.
”En tanto, las rutas de incidencia indirecta son aquellas que sólo atraviesan la Cuenca sin que la mayoría de sus usuarios realicen ascenso o descensos dentro de la Cuenca.
”Algunas de estas rutas tendrán una modificación marginal en su recorrido, a fin de permitir que crucen los corredores troncales sin mayor problema”, se afirmó en el documento.
Sí desaparecerán
Pero para Abraham Sánchez, presidente de la AMTM, explicó que aún está pendiente que rutas van a formar la empresa de la línea 2 del metrobús.
Explicó en entrevista a Intolerancia Diario que el mismo número de unidades que se integren al proyecto del metrobús debe ser el que salga de circulación, para evitar problemas de tránsito.
Señaló que según información con que cuentan, van a construirse 32 estaciones estándar, o abiertas, a diferencia de las cerradas de la actual línea 1 de la RUTA.
En la línea 2, sobre la 11 Sur circularán 86 autobuses articulados de piso bajo para 160 pasajeros, 38 autobuses de 100 pasajeros y habrá 172 vehículos para rutas auxiliares o alimentadoras, señaló.
“Casi son 300 vehículos y en la avenida 16 de Septiembre habrá 123 autobuses convencionales para cien pasajeros, sin articulados, con carril preferencial 69 autobuses de 40, para alimentación”, dijo.
—¿Tendrían que salir ese mismo número de unidades?
—Sí, mira, por ejemplo, los Galgos del Sur deben tener como 400 concesiones, las que tendrán que salir de circulación, cambiadas para integrarlas a la nueva línea del metrobús, con autobuses nuevos, entonces sí desaparecerán rutas.
“La autoridad debe tener mucho cuidado en cómo escoger a las rutas que van a formar la empresa y está en función de la demanda de la longitud de las rutas sobre el corredor y del número de concesionarios.
”Lo más importante es que entre más queden sobre la ruta, menos problemas van a tener”, y recordó que en el proceso de la ruta 1 del metrobús empezaron con 34 rutas y acabaron siendo cinco las desaparecidas, que se incluyeron en el corredor.
“Algo importante es conocer la disminución del parque vehicular, saber cuántos vehículos se contemplan van a salir de circulación a cambio del nuevo sistema.
”En el RUTA, primero dijeron que se iban a eliminar 500, la verdad es que casi no se eliminaron, porque sacaron como 150 unidades de alimentación, entonces no se eliminaron, fueron seis articulados, 16 convencionales sobre el corredor, más 95 en alimentación, entonces, el total se parece a lo que circulaba de por sí, no se eliminaron vehículos”, añadió.
”No hubo beneficio ecológico, en disminución de accidentes y gastos de operación. Lo más importante es los criterios para definir las rutas que ingresen a la empresa.
”Las que hagan a un lado, la 11 Sur no tiene muchas vialidades paralelas, más que la avenida Nacional y la 9 (Sur-Norte), les deben garantizar que no se saturen las calles”.
Dijo finalmente que el gobierno tiene por obligación transparentar el proyecto, ya que los datos que ha obtenido la AMTM han sido por contactos.