Javier Lozano Alarcón, fiel a su estilo punzante, calificó de una “farsa” la presentación que hizo Andrés Manuel López Obrador de una queja ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) por los presos políticos en Puebla.
“De lo que hace el farsante de López Obrador es el típico ejercicio demagógico de López Obrador, como si de su oficio dependiera que la CNDH investigara el tema”.
Lozano Alarcón rechazó que en Puebla haya “presos políticos”, porque dijo que no hay ninguna expresión de organismos como la propia CNDH que los denomine de esa manera.
“Así es el estilito de López Obrador”, explicó el senador panista la denuncia presentada por los legisladores de Morena ante la Comisión de Derechos humanos.
El excandidato presidencial Andrés Manuel López Obrador, acompañado de legisladores de Morena, presentó el martes, en la ciudad de México ante el ombudsman Luis Raúl González Pérez, una queja en contra de Rafael Moreno Valle, gobernador de Puebla, por actos de represión y por el encarcelamiento de activistas sociales que son considerados presos políticos del gobierno actual.
Los legisladores acudieron a las instalaciones de la Comisión Nacional en la ciudad de México, donde se entrevistaron con el ombudsman para denunciar la persecución política en contra de 45 activistas sociales y políticos por parte del gobierno de Puebla.
Pero para el senador de la república la denuncia de López Obrador posee un tinte de futurismo electoral, porque, a decir de Lozano Alarcón, Rafael Moreno Valle estará en la disputa por la Presidencia de la República y ya López Obrador lo está midiendo.
“Es miedo porque sabe que Rafael Moreno Valle, porque lo ve como un posible rival más importante”, de quien dijo es un “gran gobernador que no le tiembla la mano”.
Lozano Alarcón dijo que al farsante de López Obrador hay que desenmascararlo. “Hay que desenmascararlo en lo que está haciendo. Qué presos políticos ni que ocho cuartos, porque no puede ser. ¿Qué está haciendo la Coordinadora de trabajadores de la educación? Piden que liberen a los presos políticos. ¿Saben qué son esos presos políticos? Malditos secuestradores. Que tuvieron al sobrino de Gutiérrez Candiani en unos tinacos encerrado por meses. Esos son pinches presos políticos. No señor, esos son unos delincuentes vulgares, y ya estuvo suave, ¿no? Que hay que meter a la cárcel con firmeza y automáticamente son mártires”, señaló.
El senador de la república planteó que el gobierno del estado de Puebla ya ha brindado la información que le ha requerido el organismo nacional de derechos humanos sobre la situación en el estado.
La reconciliación panista
El senador panista Javier Lozano Alarcón descartó que detrás de sus ataques y reconciliaciones con Rafael Moreno Valle se encuentre el gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle.
Luego de la reconciliación política entre Alarcón, crítico de Madero, y el dirigente nacional del PAN en la reunión senatorial, ambos dejaron de atacarse políticamente.
En conferencia de prensa, el senador con más seguidores en Twitter aceptó que cesó en sus críticas hacia Gustavo Madero Muñoz gracias a la intercesión de Rafael Moreno Valle.
“Moreno Valle habló conmigo y habló con Madero. Y con los dos habló con mucha franqueza, a mí me dijo es el jefe nacional. Hay que respetarlos, hay que estar unidos. Hay que apuntar para otro lado. Me hizo una mera sugerencia y una recomendación en aquella cena con los gobernadores, lo hizo con mucho respeto, y luego le achacan que si yo digo algo, pues dicen que viene del gobernador, que me da instrucciones. Pero no, ni en un sentido ni en el otro”, expuso el senador de la república.
El pasado 29 de enero, luego de acres críticas contra Madero, el senador Lozano le bajó “dos rayitas” a sus ataques cuando se encontró con Madero en la plenaria senatorial blanquiazul.
El senador de la república reviró que el enfrentamiento con el líder nacional Gustavo Madero es cosa juzgada en su partido. “¿De qué hablamos Madero y yo? De nada. Pues hablamos de la sanción, ¿no? Hablamos de alguna posición, ¿no? Simplemente hay muere y vamos pa delante. Nos tomamos un café y vemos otras cosas”.
De esta madera, el incisivo político planteó que no tiene miedo sobre la posible expulsión de su partido y, en todo caso, se trataría sólo de una amonestación, que lo más que puede ser es que viene “guanga”.
Siguiendo en los temas partidistas, Javier Lozano Alarcón descartó que haya una cerrazón en contra de los grupos tradicionalistas del PAN. Lozano dijo que las críticas también van en sentido contrario en que los llamados “panistas de pedigrí” también han excluido a quienes no ven como panistas originarios, como le ha pasado al mismo senador del blanquiazul.
En el caso de los temas de la Federación como la llegada de Virgilio Andrade a la Secretaría de la Función Pública, Lozano Alarcón dijo que por su relación cercana con el presidente de la república, Enrique Peña Nieto, existe un conflicto de interés para investigar las propiedades de la familia del presidente.
“Me cae bien, lo conozco de hace muchos años. Pero no es el camino, yo digo que el camino es la aprobación del sistema nacional de anticorrupción”, consideró Javier Lozano Alarcón.
El senador dijo que con las reformas en el tema del endeudamiento de los estados, el propio estado de Puebla deberá revisar la situación de los recursos que se pagan a través de mecanismos como los Proyectos de Prestación de Servicios. Pero Lozano no ahondó en la situación de los mismos.
