El homicidio de Isarve Cano Vargas, estudiante de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), debe ser esclarecido al tiempo de que la violencia contra las mujeres en el estado debe ser atendida.
En Puebla pareciese que las autoridades son indiferentes e indolentes ante las desapariciones, asesinatos y feminicidios que enfrentamos, señaló la diputada perredista Roxana Luna Porquillo.
Lamentablemente, en estos momentos, la familia de Isarve Cano Vargas, al igual que las de miles de mujeres poblanas como la de Araceli Vázquez, Raquel Torres y Judith Coatl, se enfrenta a una investigación endeble y poco confiable que se enmarca en una crisis de derechos humanos en la entidad.
La criminalización de las personas jóvenes es una constante del gobierno poblano renuente a las críticas y carente de información oficial en torno al asesinato y desaparición de estas personas en lo que va del año.
¿Cuántas mujeres jóvenes son extrañadas por sus familias en Puebla ahora? ¿Cuántas sentencias se han dictado y cuántas investigaciones se han abierto por feminicidios? ¿Cuántas mujeres más faltan hasta que nuestras autoridades actúen para detener esta violencia?
Por ello, exhorto a las autoridades correspondientes de Puebla a ejecutar una investigación clara y con visión de derechos humanos que esclarezca de manera pronta y expedita el homicidio de la joven Isarve Cano, y que garantice la vida, seguridad e integridad de todas las mujeres en la entidad.
