Con el 45.5 por ciento de la población, Puebla se ubica en el noveno lugar en pobreza laboral, de acuerdo a los datos reunidos por México ¿cómo vamos?, con base en información del Coneval, además la entidad se ubica en el tercer lugar de los estados con mayor informalidad de acuerdo al estudio.

La pobreza laboral significa que el salario e ingresos son insuficientes para la manutención de los integrantes de una familia, por lo que la entidad se encuentra en el noveno lugar; sin embargo, el estudio también advierte que el rezago en la entidad no es reciente o debido a la pandemia de Covid-19, pues desde 2006 prevalece en rojo en el semáforo económico.

De acuerdo al estudio consultado por Intolerancia Diario, entidades como Chiapas, Guerrero, Oaxaca, Tlaxcala, Hidalgo, Veracruz, Morelos, Tabasco, Puebla y San Luis Potosí conforman la lista de diez demarcaciones con mayor pobreza laboral.

El estudio, que es elaborado con datos del Coneval, refiere que 50.1 millones de personas en el país se encontraron en situación de pobreza laboral en el primer trimestre del año.

Se cita que “esto significa que el 39.4 por ciento de la población total en el país se encontró en una situación donde los ingresos laborales de su hogar no son suficientes para adquirir una canasta alimentaria básica para todos los miembros”.

Las mujeres en situación de pobreza laboral

En Puebla 1.16 mujeres están en pobreza laboral por cada hombre, de acuerdo al estudio, aunque en otras entidades es mayor el rezago para las féminas, por ejemplo, en Jalisco, en Aguascalientes, en Zacatecas y en Tamaulipas el promedio es de 1.24 y 1.30 mujeres en pobreza laboral de mujeres por cada hombre.

El documento señala que el 47 por ciento de la población de mujeres en Puebla se encuentran en pobreza laboral, es decir, la entidad se ubica en semáforo económico rojo.

La informalidad en Puebla

Por otra parte, el documento cita que Puebla se ubica dentro de las tres primeras entidades con mayor informalidad laboral, antes esta Oaxaca y Guerrero, mientras que, Chihuahua, Nuevo León y Baja California mostraron los niveles más bajos.

El documento advierte que “la informalidad laboral representa un detrimento para el mercado laboral y los trabajadores de cada estado, ya que los coloca en una situación laboral más vulnerable y, al privarlos de acceso garantizado a prestaciones como un seguro de gastos médicos, resulta en una calidad de vida más baja para quienes se encuentran en esa situación”, se cita en el estudio.

Se advierte que la informalidad está ligada a la pobreza, es decir, los empleados no tienen acceso a seguridad médica, a prestaciones y tampoco tienen derecho a una pensión para cuando lleguen a una edad adulta mayor.

En el documento se advierte que los gobiernos federal, estatal y municipales deben llevar a cabo acciones para reducir la pobreza laboral en las entidades, y es que esta situación impacta en las familias, quienes tienen más dificultades para acceder a la canasta básica, a servicios de salud y a bienes.

La pobreza y la informalidad laboral “generan rezagos que van más allá de una incapacidad temporal para adquirir bienes alimenticios o una falta de acceso a prestaciones laborales”, se advierte.