Nibardo Hernández Sánchez echa la vista al retrovisor para recordar que, en la elección de 2018 en Puebla, fue el único candidato del PRI a diputado local que sobrevivió a ese tsunami llamado Andrés Manuel López Obrador y en un examen de autocrítica acepta que la gente, entonces, “estaba asqueada de la política del PRI” y que no dudó en ponerlo en su lugar. El voto de castigo, le llama.
Ahora, ve las cosas distintas, desde la aspiración a la elección consecutiva, en el primer proceso en el que aplica la reforma que se avaló en 2014 y que permite a los legisladores buscar la reelección.
Ahora, “la gente nos está dando la oportunidad, a los priistas, a los hombres progresistas, de poder componer esto que está mal y que, en menos de tres años, han destruido los gobiernos de Morena (Movimiento Regeneración Nacional)”, sentencia.
Orgulloso de ser parte del Movimiento Antorchista desde niño, hoy busca permanecer como legislador por el Distrito 23 local, el que representa en la actual LX Legislatura del Congreso del Estado de Puebla.
Una coincidencia en su contrincante morenista provoca morbo. El exsecretario particular del senador Alejandro Armenta Mier, el joven Eduardo Castillo, también busca ese distrito y también tuvo su origen en el antorchismo, en su natal Cuayuca de Andrade.
Nibardo lo ningunea, porque ni en su colonia, literalmente, ha servido a sus vecinos. Dice el diputado priista, en un tono que suena casi a advertencia: “Lo conozco muy bien, sé de su trayectoria, sé de dónde viene, sé cómo piensa […] No tiene ninguna capacidad para ser diputado. No ha hecho nada, ni siquiera en el Barrio San Pedro, que es donde vive”.
Hernández Sánchez hoy es optimista y considera que la siguiente bancada del PRI en el Congreso del Estado, podría alcanzar hasta 10 legisladores, con lo que tendría una gran influencia en la LXI Legislatura.
“Para mí, la reelección es la oportunidad de concluir pendientes que en su momento, en el 2018, yo tuve con los ciudadanos, porque nosotros creemos que a través de los diputados o los puestos de elección popular que hay, pudiéramos un tanto ser el vínculo para el desarrollo de las comunidades, comunidades que están abandonadas, y la organización (Movimiento Antorchista) cree conveniente participar en el escrutinio de los ciudadanos, en donde tú sabes que participan los ciudadanos en general, sean los militantes de Antorcha o no y de otros partidos".
“Dijimos que somos diputados diferentes, que somos gente de trabajo, que la gente nos tiene que juzgar, no por lo que decimos, sino por nuestros hechos, por eso en esta reelección, trabajaremos con base en lo que recogimos en su momento en el 2018 y lo que estamos recogiendo de demandas, de peticiones que quieren los ciudadanos en el Distrito 23, con cabecera en Acatlán de Osorio”.
El antorchista conoce bien el distrito por el que contiende, gracias a que mantiene su residencia en Acatlán de Osorio.
“Yo soy originario de Tecomatlán, orgullosamente, y vivo en Acatlán. Aquí vivo, aquí trabajo, tengo una casa de gestión, cosa que aquí no existía (…) vivo aquí y precisamente, orgullosamente, me siento que he contribuido, poquito, al desarrollo de la Mixteca, pero falta mucho, por eso la reelección me permitirá, si es que el voto nos favorece, seguir desarrollando la Mixteca, que ha sido olvidada”.
Encontró decepción
Desde aquel 2018 que Andrés Manuel López Obrador y Morena arrasaron en las elecciones, las cosas han cambiado. Nibardo Hernández considera que la gente vive hoy la decepción de haber votado por quienes “ofrecieron esperanza a cambio del voto”.
“Mira, yo respeto mucho a los candidatos de Morena, los conozco a todos, conozco a los 38 candidatos que están siglados por Morena, pero te puedo decir que en mi caminar constante por la Mixteca y el acercamiento con la gente, la gente está decepcionada. ¿Por qué decepcionada? Porque prometieron mucho y no han hecho nada".
“La gente se queja que no hay obras, que no hay servicios, que no hay nada de lo que les prometieron, y aquí hay que reconocer, lo único que han hecho es aumentar el apoyo a los ‘abuelitos’ de la tercera edad y nada más, pero no hay apoyos al campo, no hay fertilizantes oportunamente, desaparecieron casi 109 fideicomisos a nivel federal, desaparecieron programas sociales como Prospera”.
El PRI alejó a la gente
Sin embargo, Nibardo Hernández acepta que el Partido Revolucionario Institucional (PRI) tuvo que ver con que la gente se alejara de ellos.
“Estaba asqueada de la política del PRI, de sus gobernantes en su momento, y la gente, a nosotros los priistas, nos puso en nuestro lugar.
“Por eso el día de hoy, en el 2020-2021, los priistas que hicieron mal tienen que reconocer que nos aplicaron lo que la democracia hace, quitar a los malos gobernantes y poner a otros; pero creo que pusieron a un mal gobernante, pusieron a un partido que no sabe gobernar, no solamente a nivel federal, a nivel municipal”.
Para que la cuña apriete
En la contienda por el Distrito 23, el candidato de Morena, Eduardo Castillo López, también tiene origen y lazos familiares con el Movimiento Antorchista, a lo que Nibardo Hernández le restó importancia.
“Te puedo decir que eso es algo que están manejando los medios, que ‘para que la cuña apriete tiene que ser del mismo palo’. Yo te puedo decir que yo soy de Tecomatlán, nací, crecí, estudié en las escuelas de Tecomatlán, no tuve la necesidad de irme a estudiar a otro lado".
“Conocí desde la primaria al Movimiento Antorchista y me he identificado con él y conozco el trabajo, conozco la educación, conozco la lucha que me ha dado el Movimiento Antorchista, conozco a sus miembros, conozco quiénes son militantes, quiénes son simpatizantes del Movimiento Antorchista y te puedo decir que yo a Lalo lo conozco como un ciudadano común y corriente”.
-¿No es Antorchista?
-No.
-Es tu contrincante, eso sí, finalmente tiene relaciones familiares con el antorchismo, ¿puede arrebatarte el voto del movimiento?
-Jamás… Para mí no va la guerra sucia. Conozco a Lalo Castillo, sé de su trayectoria, sé de dónde viene, sé cómo piensa.
-¿Tiene capacidad o no Castillo para ser diputado local?
-No tiene capacidad... porque para poder ser diputado, desde mi punto de vista, hay que demostrarles a los ciudadanos... si realmente has participado. Y la verdad, con todo respeto, Eduardo Castillo no ha hecho, ni siquiera en el Barrio San Pedro, que es donde vive, no ha hecho nada. Es totalmente desconocido.
El PRI en el Congreso
El Partido Revolucionario Institucional (PRI) tiene una bancada de cuatro integrantes en el Congreso del Estado, cantidad que podría aumentar significativamente para la siguiente legislatura, de acuerdo con las proyecciones del antorchista.
“Creo que si los ciudadanos reflexionan su voto, van a volver a darle oportunidad a diez diputados priistas que estamos comprometidos, en la medida de nuestras posibilidades, a trabajar por nuestros representados.
El tamaño de esa fracción no solo significaría para el PRI un mayor margen de cabildeo, también una nueva relación con el gobernador Miguel Barbosa Huerta.
“Creo que el gobernador necesita pesos y contrapesos en el Congreso. Lo han visto los cuatro diputados, han visto mi desempeño, yo he sido muy respetuoso de las iniciativas que nos emite el Congreso, que el gobernador nos envía y en muchas de ellas yo he estado de acuerdo".
“Una iniciativa que mandó el gobernador fue que los productores agrícolas y del campo, los de Tránsito no los infraccionaran, y yo estuve de acuerdo, me parece una buena iniciativa, y el grupo parlamentario del PRI lo apoyamos, entre ellos tu servidor (…) pero hay iniciativas en las que yo no estoy de acuerdo, nos hemos opuesto, pero no somos mayoría, la mayoría hoy y la mayoría absoluta la tiene Morena”, finaliza la entrevista.