Ante los constantes robos que sufren los clientes que acuden a los mercados, tianguis, así como centros de abasto en el estado, la diputada por Morena, Karla Martínez Gallegos, llamó a las autoridades estatales y municipales a establecer una estrategia de vigilancia para proteger a los ciudadanos que acuden a esos lugares.

Señaló que en Puebla y en gran parte del país se han difundido noticias sobre la violencia existente dentro y alrededor de los mercados y/o centrales de abasto. Lo anterior, debido al importante flujo de dinero, mercancías y personas que en ellos convergen, pero, además, porque se han visto por parte de los delincuentes como guaridas o centros de comercio y distribución de los productos robados, e incluso como centros de explotación, prostitución y de venta de armas y drogas.

Expresó que tal es el caso del tianguis de San Martín Texmelucan, el centro de venta más grande de Latinoamérica y que alberga los productos de comerciantes de distintos estados de la república.

Dijo que en distintas ocasiones se ha comentado sobre los robos sufridos contra comerciantes y compradores, quienes son acechados alrededor del tianguis para ser despojados de sus productos, dinero e incluso vehículos.

A la par y en más de una ocasión se ha mencionado que dentro del mismo se comercian productos ilegales, como armas y drogas, lo cual mancha la reputación no sólo de una región sino de las personas que honradamente acuden a vender sus mercancías para subsistir y llevar el sustento a sus hogares.

Advirtió que casos similares, aunque en menor proporción, al menos por su extensión territorial, son los ocurridos en los mercados Xonaca e Hidalgo, y sus zonas aledañas. “En dichos polígonos y de manera recurrente se ha reportado la supuesta venta de droga, armamento, de productos robados, así como casos de violencia e incluso la supuesta ubicación de cadáveres y generación de balaceras, como la recientemente presentada en el Mercado Hidalgo, lo que ha dado nota en distintos medios y en las propias redes sociales.”

Señaló que tradicionalmente los mercados y tianguis, además del intercambio y consumo de productos, servían para la convivencia familiar, pero hoy en día, se han convertido en guaridas para los criminales que, como ya se mencionó, manchan la reputación de quienes se ganan la vida de manera honrada.

Precisó que en consecuencia, la autoridad debe garantizar la seguridad de sus asistentes, protegiendo no sólo su integridad sino sus recursos, patrimonio y productos.

Insistió en que lo anterior deja muestra clara de la necesidad de reforzar la seguridad en los mercados y centrales de abasto, así como en sus zonas aledañas, a través de la coordinación de las autoridades competentes, quienes de manera conjunta deberán multiplicar los rondines y, de ser necesario, optar por la instalación de videocámaras, botones de pánico o cualquier otro elemento que permita disminuir los delitos cometidos en su entorno.

Recordó que en términos de la Ley Orgánica Municipal son atribuciones de los Ayuntamientos el garantizar el bienestar y tranquilidad de las personas y sus bienes, así como preservar y guardar el orden público en el territorio municipal, expidiendo para tal efecto los reglamentos, planes y programas respectivos.

Recordó que presentó ante el pleno un punto de acuerdo por el cual se exhorta al Titular de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) del Estado y a los 214 ayuntamientos y tres Concejos Municipales de la entidad, para que de manera coordinada y en el ámbito de sus atribuciones establezcan una estrategia de seguridad en torno a los mercados, tianguis, centrales de abastos y, en general, centros de comercio de alta afluencia, que incluya el fortalecimiento de la vigilancia a través de recorridos, así como con la instalación de videocámaras y botones de pánico, que permita alertar sobre la posible comisión de delitos con el fin de garantizar la integridad y patrimonio de los comerciantes y consumidores.