A cuatro años y medio de que el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), pagó 417 millones de pesos por el terreno de CIMA, lugar donde se construiría uno de los hospitales privados más exclusivos de Puebla, las seis hectáreas siguen ociosas a pesar del crecimiento de la población que requiere servicios, declaró el diputado federal Mario Riestra Piña.
En entrevista el legislador señaló que los hospitales de San Alejandro y Amozoc por parte del IMSS, están garantizados, y no es un tema de que estén en riesgo, sin embargo el punto es que el tiempo es fundamental, pues el retraso de un mes, dos meses, puede resultar costoso en vidas, y lo que urge es que se pongan a trabajar lo antes posible esos hospitales.
Riestra Piña señaló que se ve retrasos en Amozoc, donde se cedió un terreno para construir el hospital, y esos hechos tienen un impacto social, que detrás de ellos hay sufrimiento y falta de atención de muchos derechohabientes y trabajadores.
Precisó que lo que no se ha confirmado y algo en lo que se insiste por parte de los legisladores, es la utilización del terreno de CIMA en San Andrés Cholula, donde se compraron seis hectáreas, por un monto de 417 millones de pesos y están ociosas desde hace cuatro años y medio.
Comentó que es en esta zona de San Andrés Cholula donde se ha presentado en los últimos treinta años, y las personas cientos de colonias que se ubican en la zona, entre ellas las de la Reserva Atlixcáyotl no cuentan con una clínica del IMSS cerca, a pesar de estar asegurados.
Dijo que este terreno puede ser una alternativa para atender a los derechohabientes, y se requiere que haya voluntad por parte del gobierno federal para atender a la población.
El legislador recordó que recordó que el Hospital Regional número 36, conocido como San Alejandro, atendía cinco estados más como lo son Hidalgo, Morelos, Tlaxcala, Veracruz y Oaxaca; En promedio había 2 mil 256 consultas mensuales, así como 8 mil nacimientos, y era considerada la maternidad más grande de América Latina.
Solidaridad con trabajadores
Por otra parte reconoció que fue invitado a participar a la marcha del pasado lunes realizada por trabajadores del Seguro Social, y es que es grave la situación que están viviendo los miles de trabajadores del instituto.
Comentó que de un día para otro perdieron su lugar de trabajo cientos de médicos, enfermeras y camilleros que se tuvieron que trasladar a hospitales como San José, La Margarita, y otras área, sin tener las condiciones adecuadas para poder desempeñar su trabajo.
“Actualmente carecieron de un escritorio, silla, o espacio para desempeñar su trabajo, y hoy además de ese hacinamiento, no hay camas suficientes para atender pacientes, tampoco medicamentos, lo cual hace crítica la situación".
Expresó que como diputado federal los entiende y se solidariza con ellos, y se ha seguido la comunicación con el IMSS, mismos que refieren que en junio inicia la reconstrucción de San Alejandro.