A cuatro años del fallecimiento de la primera gobernadora de Puebla, Martha Erika Alonso Hidalgo, la presidenta estatal del Partido Acción Nacional (PAN), Augusta Díaz de Rivera, señaló que el legado que dejó, es que las mujeres sintieran que podían levantar la mano para pedir gobernar.
Díaz de Rivera señaló que es una fecha que no se puede olvidar sobre todo porque es un día gozoso para el mundo cristiano, pero nadie olvida esa tragedia tan terrible, que hasta la fecha no se ha esclarecido por completo.
“Todos, propios y extraños, nos quedamos realmente asustados porque si se considera que a personas tan poderosas les puede pasar eso, pues cómo quedan los demás”.
Al preguntarle qué representa Martha Erika para el PAN, señaló que era una persona muy querida, que se ganó a pulso el lugar que tuvo.
“Le tengo mucho respeto a las esposas de los gobernantes, porque cuando quieren hacer un trabajo político como era el caso de ella que dijo “si yo quiero, si le entro, si me meto”, son personas que ya vienen con una experiencia política que debe respetarse y aprovecharse”.
Del legado de Alonso Hidalgo, señaló: “Esposas de presidentes municipales levantan la mano, y adelante, una vez que ya estuvieron tres años co gobernando, y ese fue el legado que dejo Martha Erika, que muchas mujeres se sintieran con el poder de levantar la mano y gobernar”.
La presidenta del PAN aclaró: “Cuando digo esclarecer no estoy señalando que necesariamente haya sido un evento provocado, no se descarta ni lo uno ni lo otro, los accidentes ocurren. De qué se muere un ciclista, de que lo atropelló un camión, y no necesariamente lo quiso matar el conductor, los accidentes de helicóptero en el estado han sido una constante, se cayó uno al gobernador Melquíades Morales yendo a bordo, en el sexenio de Mario Marín varias esposas de funcionario murieron”.
Finalmente señaló que es un orgullo para el PAN que la primera gobernadora que tuvo el estado de Puebla, haya sido una panista como Martha Erika Alonso.