El despojo del agua podría ser considerado delito a nivel local y castigado con penas que irían de los tres meses a los cinco años de prisión, además de las multas correspondientes por el uso indebido del recurso natural.
El diputado local Miguel Márquez Ríos presentó la propuesta para homologar el Código Penal Estatal con el Federal, a fin de reconocer la figura de despojo de aguas como delito en la entidad.
El legislador explicó que se busca proteger los recursos hídricos del Estado de Puebla y, ante ello, se plantea la reforma al Artículo 411 del Código Penal para precisar que “comete el delito de despojo de aguas quien de manera furtiva o mediante el empleo de cualquier tipo de violencia, amenaza o engaño; despoje, desvíe o haga uso de aguas propias o ajenas, o trate de ejercer un derecho real sobre aguas que no le pertenezcan; o en su caso, de aguas respecto de bienes propiedad pública o bajo la administración del Estado”.
Asimismo, se establece que a las personas que cometan este delito se les impondrá una sanción de tres meses a cinco años de prisión y multa de diez hasta cien veces el valor diario de la Unidad de Medida y Actualización, así como al pago de la reparación de daños; independientemente de las sanciones impuestas en casos donde se afecte la infraestructura que atiende el manejo, transportación y distribución de las aguas”.
Dijo que se trata de velar por los derechos de las personas que, legalmente están facultadas para administrar las aguas pertenecientes al Estado poblano, además de promover la participación ciudadana, a través de la denuncia.
Precisó que México tiene 37 regiones hidrológicas, en el territorio de Puebla se sitúan en cuatro regiones hidrológicas: RH18 Río Balsas; RH27 Ríos Tuxpan-Nautla; RH28 Río Papaloapan y la RH26 Río Pánuco; de éstas, las tres primeras abarcan casi la totalidad del estado, y destaca la región del Balsas, que desemboca en el Océano Pacífico, mientras que la última ocupa tan solo unas pocas decenas de km2.