Durante el pasado mes de junio, un equipo internacional de astrónomos pudo ver cómo un agujero negro, V404 Cygni, producía estallidos de color rojo a lo largo de dos semanas después de consumir el material despojado por su compañera binaria, es decir, la estrella con la que comparte órbita, según señala la Universidad de Southampton.
Este agujero negro fue el primero descubierto en nuestra galaxia y se encuentra a 7.800 años luz de nuestro planeta.
Y, ahora, se ha descubierto que puede ser muy brillante cuando está devorando material, como explican en el estudio realizado por un equipo internacional liderado por la Universidad de Southampton y que ha sido publicado en la revista Monthly Notices de la Royal Astronomical Society.
En esta revista se ha informado de que el agujero negro emitía “destellos” deslumbrantes de color rojo que duraban una fracción de segundo, es decir, eran diez veces más rápidos que nuestro pestañeo. Estos “destellos” eran explosiones del material que V404 Cygni era incapaz de tragar.
Para estos astrónomos el color rojo está asociado con chorros de movimiento rápido de material eyectado cerca del agujero negro. Estas observaciones proporcionan nuevos conocimientos sobre la formación de chorros y fenómenos en los agujeros negros.
Como explica el principal autor del estudio, el Doctor Poshak Gandhi profesor asociado y STFC Ernest Rutherford Fellow en la Universidad de Grupo de Astronomía de Southampton, “la alta velocidad nos dice que la región donde se está emitiendo la luz roja debe ser muy compacta. Reuniendo pistas sobre el color, la velocidad y la potencia de estos destellos, se concluye que esta luz se emite desde la base del chorro de agujero negro. Todavía se desconoce el origen de estos chorros, aunque sospechamos que los fuertes campos magnéticos juegan un importante papel”.

Uno de los estallidos más brillantes en los últimos años

Debido a la naturaleza impredecible y a la rareza de estos brillantes “estallidos” del agujero negro, los astrónomos tienen muy poco tiempo para reaccionar. Por ejemplo, la última erupción de V404 Cygni fue en 1989. Sin embargo, V404 Cygni fue excepcionalmente brillante en pasado mes de junio y fue una excelente oportunidad para realizar este trabajo. De hecho, este fue uno de los más brillantes estallidos de agujero negro en los últimos años porque la mayoría de los estallidos son mucho más tenues, lo que dificulta su estudio.
El suceso del pasado mes de junio ha motivado a los astrónomos para “coordinar los esfuerzos observar estallidos futuros" debido a su corta duración y fuertes emisiones en todo el espectro electromagnético, será necesaria "una estrecha comunicación, el intercambio de datos, y los esfuerzos de colaboración entre astrónomos" señala el Dr. Gandhi, quien añade que "estas observaciones pueden ser un verdadero reto, especialmente cuando se trata de observaciones simultáneas desde telescopios terrestres y satélites espaciales" según explica".