Resultado de la propagación del coronavirus en Puebla, algunos restaurantes han tenido que cerrar sus puertas a comensales y han optado por ofrecer sus alimentos y bebidas a través de plataformas como Rappi, Uber Eats y Sin Delantal.
Son los repartidores de estas aplicaciones quienes que han generado parte de ingresos a los restauranteros en esta temporada, además ayudan a la ciudadanía a no salir de sus casas y así evitar contagiarse de Covid-19.
Sin embargo, trabajadores de estas plataformas han explicado que, conforme los números de contagios van en aumento, la cantidad de entregas han disminuido, prueba de ello es que, antes de Semana Santa se realizaban hasta 10 entregas en un día, ahora estas se han reducido a apenas 5, es decir, en un 50 por ciento.
Argumentan que deben continuar trabajando día y noche, pues ellos también deben mantener a flote la economía de sus hogares, ya que, en algunas ocasiones, es el único sustento que las familias tienen para subsistir.
Para trabajar, los repartidores deben extremar las medidas sanitarias, como lavarse las manos constantemente, usar cubrebocas, guantes y al ir a los negocios, así como a los hogares poblanos, deben guardar la sana distancia.