Pese a todos los esfuerzos realizados para tratar de aparentar unidad interna, el panismo local naufraga cada vez rumbo a un enfrentamiento abierto con el gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle Rosas, quien irónicamente llegó al poder a través de las siglas del partido al cual hoy divide.
Desde la comida celebrada el pasado viernes en Bodegas del Molino, se dejaron ver los primeros síntomas de que la reunión de consejo a la cual se convocó para el sábado en el Hotel Fiesta Inn, cerca de la Volkswagen, no iba a prosperar.
En la misma mesa de honor comenzaron los primeros reclamos el pasado viernes, cuando el operador morenovallista, Ángel Alonso Díaz Caneja, comenzó a provocar al dirigente estatal del albiazul, Juan Carlos Mondragón Quintana, quien cayó en la trampa y le respondió “actorazo, actorazo”, lo cual encendió aún más a Díaz Caneja.
Sólo la intervención del gobernador calmó los ánimos ya encendidos, pero ni así se pudo llegar a acuerdos para la conformación de los comisión de orden y vigilancia, la cual seguramente tendrá mucho trabajo en los próximos días, sobre todo por el tema de la afiliaciones “pirata” y los procesos que existen en contra de personajes como el propio Díaz Caneja, Roberto Grajales Espina y Genaro Ramírez identificados con el grupo del gobernador.
El control de este órgano de gobierno al interior del panismo, fue lo que ocasionó que ante la falta de acuerdos, se decidiera suspender la sesión del consejo estatal, ya que se hubieran exhibido las diferencias existentes entre ambos grupos, pero el daño por más que se quiso evitar ya está hecho.
El panismo local ha hecho evidente ya las fisuras que existen desde hace tiempo y que lejos de disminuir, se han ensanchado y crecerán aún más cuando abiertamente arranquen las precampañas de los aspirantes del albiazul a la presidencia de la República.

Turbulencia en Los Pinos
Fuentes bien informadas aseguran que ahora sí ya se vienen los cambios en Los Pinos y que todos los ajustes tienen que ver con que el próximo 15 de septiembre, cuando Enrique Peña Nieto entrega la gubernatura del Edomex, a su sucesor Eruviel Ávila.
Los cambios son la salida de Ernesto Cordero de la Secretaría de Hacienda, a la cual siempre si arribará José Antonio Meade.
El que también es un hecho es la llegada de Roberto Gil Zuarth, quien deja la Secretaria Particular de la presidencia, para hacerse cargo de la Secodam.
También esta más que amarrada la llegada de Javier Lozano Alarcón a la oficina de la presidencia.
En este mismo paquete de enroques, se aprovechará la situación para aprobar la salida de José Ángel Córboda Villalobos, de la Secretaria de Salud y el arribo el aún titular del Seguro Popular, Salomón Chertorisvki Woldenberg a esta posición.
Se habla de muchos más enroques derivados de estos movimientos que se dice sacudirán esta semana a la clase política nacional y que tienen la mira puesta en el 2012.

Sobre la Contraloría interna del Congreso
La propuesta para crear un Contraloría Interna para el Congreso del Estado, fue mal entendida —o más bien distorsionada— por quienes no entendieron el fin de la propuesta que se presentó dentro de la nueva ley orgánica del poder legislativo.
De entrada la propuesta es más que buena, porque busca que existe un órgano preventivo, que no correctivo, como actualmente ocurre con la revisión de la cuenta pública de este poder, por parte del Órgano de Fiscalización Superior.
La propósito de la propuesta fue desviada de manera perversa con la finalidad de hacer ver que era una instrumento de control o de poder para un solo diputado, cuando no es así.
En el análisis real, se puede encontrar que la propuesta gira en torno a que formen parte de este órgano, los integrantes de la Gran Comisión, con los cambios junta de gobierno y también los de la mesa directiva, entre otros integrantes, para que haya una absoluta y total transparencia en el manejo de los recursos con los que cuenta el poder legislativo.
Tal vez esto fue lo que no les gusto a muchos, el que se busque que haya cuentas claras y transparentes y no la entrega de bonos y ampliaciones presupuéstales a discreción. Que nadie se confunda.
Por cierto, la reforma a la ley orgánica del Congreso avanza bien, el pasado viernes se reunieron los coordinadores parlamentarios y ya hay consensos en lo único en que aun están atoradas las cosas es el tema de las fracciones parlamentarias, que se busca que para que se pueda considerar de esta forma, se necesitan al menos dos integrantes y en el tema de la duración de la mesa directiva.
En ambos casos, todo parece indicar que la mesa directiva durará seis meses en funciones, se ampliarán los periodos de trabajo de cada uno y se dejará como esta actualmente el tema para considerar una fracción parlamentaria. El voto ponderado y la limitación a las participaciones de los diputados en tribuna, van.