Como una patada en las partes nobles cayó dentro del panismo poblano la detención de Pedro Barojas de Rosas, secretario particular de Ana Teresa Aranda Orozco, una de las líderes históricas de Acción Nacional en Puebla.
Y es que previo a estos acontecimientos, el gobernador Rafael Moreno Valle Rosas y sus operadores habían “planchado” perfectamente bien que el proceso de instalación del nuevo Consejo Político Estatal del PAN se llevará a cabo, sin agravios de ninguna de las dos partes y sobre todo en perfecta calma.
Previamente, el mandatario y el “ala dura” del panismo habían pactado que la integración de las comisiones, sobre todo la de Orden, se hiciera de manera equilibrada y que hubiera representantes de todos los grupos del panismo; a cambio el gobernador cedió en el hecho de que los proceso que se han abierto en contra de algunos personajes que operan para él al interior del albiazul, siguieran hasta sus últimas consecuencias
La negociación parecía ser buena y dejaba a ambos bandos más que satisfechos para llegar a su encuentro de este domingo en muy buenos términos; no obstante, la detención del secretario particular de Ana Tere volvió a lastimar al panismo tradicional, el cual evitó enfrentarse con el gobernador.
La convención a final de cuentas se desarrolló con tensión en ambos bandos, pero no tuvo el saldo rojo que se vaticinaba antes de este domingo.
A final de cuentas el panismo tradicional se va tener que lamer las heridas y el saldo salió a favor del gobernador, aunque ya a todos les quedó claro las formas autoritarias que tiene la actual administración para cobrarse las afrentas.

Cayó Hernández Quintana
Quedó muy claro que toda la persecución que se armó en contra del exauditor mayor del OFS, Víctor Manuel Hernández Quintana, tenía como único fin el que este personaje presentase su renuncia, lo cual finalmente sucedió el pasado viernes.
La cabeza del antes auditor mayor rodó como se buscaba desde un inicio, más como un acuerdo político entre grupos que como parte de un acto real de justicia y de buscar componer las cosas en un organismo, el cual se supone que es autónomo.
El OFS se mantendrá como un “garrote político” para aplicar la ley a secas a los enemigos, y la justicia y gracia a los que callan y obedecen.
El pecado de Hernández Quintana, más allá de las múltiples anomalías que cometió durante su gestión al frente del OFS, fue no entregar la posición cuando se la pidieron.
Si hubiera cedido desde un inicio a lo que le pidieron, se hubiera ahorrado toda la exhibición y la deshonra en la que tuvo que abandonar su posición.
Ahora, si no hay cambio de planes, todo parece indicar que un morenovallista puro y obediente como David Villanueva será ungido en los próximos días como el nuevo titular del OFS.
¡Vaya gracia para el marinismo!, su suerte está en manos del gobernador Moreno Valle, pero también del yerno del exgobernador Melquiades Morales.

Molestia legislativa
Hasta en los legisladores locales ya se comienza a manifestar la molestia que existe por la política que se ha implementado en materia de comunicación social por parte de la actual administración, la cual emite cartas aclaratorias al por mayor, sin ton ni son.
Ya son varios los diputados locales molestos porque hasta ellos son objeto de presión para que refuten temas en lo cuales están conscientes de que no hay nada que decir, pero lo hacen porque “son órdenes de muy arriba”.
Se dice que ya son varios los que cuentan los días para que el vocero Sergio Ramírez Robles se vaya de Puebla, lo cual algunos dicen ocurrirá hasta que termine el año.