Finalmente se acaban este miércoles las campañas electorales, para que el próximo lunes sepamos quién será el sucesor de Felipe Calderón Hinojosa.
En esta elección es de destacar, tal vez como nunca, la participación de jóvenes universitarios, quienes por primera vez no se quedaron callados e hicieron un movimiento que puede crecer aún más después del 1 de julio si no se contamina. La participación de las universidades fue fundamental también en Puebla.
Por ejemplo, en la Universidad Autónoma de Puebla (UAP), sus directivos y funcionarios supieron navegar a lo largo de estos tres meses de manera totalmente neutral.
En la máxima casa de estudios poblana hubo libre expresión total, al grado de que también pegó el movimiento nacional de #yosoy132, de una universidad diferente como la Iberoamericana. La neutralidad de la UAP para no apoyar a ningún candidato fue visible, por lo que no hubo queja alguna de ningún partido político.
Cuántos no hubieran querido sembrar raíces en estos rumbos. Y es que ahora en la UAP se respira una verdadera libertad de expresión que generaciones anteriores añoraron por décadas.
Nuevo consejo
Este lunes se renovó en la UAP el Consejo de Docencia para el periodo 2012-2016. El trabajo del consejo saliente contribuyó en la construcción de la nueva oferta académica que cambió en 8 años con el proyecto Minerva.
Se crearon licenciaturas como Nutrición, Procesos Educativos, Gastronomía, Actuaría, Ingeniería en Tecnologías de la Información e Ingeniería en Mecatrónica.
El nuevo consejo será encabezado por el rector Enrique Agüera, como presidente del Consejo de Docencia; el secretario general, Alfonso Esparza Ortiz y el vicerrector de Docencia, Jaime Vázquez López.
El Consejo de Docencia es un órgano importante para la universidad, ya que a su cargo está tomar decisiones de orden académico como son planes, programas de estudio, rediseños curriculares y actualización de los mismos.
El mail
El siguiente es un correo que llegó de un joven desesperado por la Universidad Siglo XXI:
“Hago una pequeña mención para los directivos de mi exuniversidad, que por motivos de ética no voy a mencionar el nombre, sería falto de respeto decir que la Universidad Siglo XXI ha implementado un plan de estudios donde aumentan a 6 los niveles de inglés cuando siendo incorporada a la UAP sólo deberían de ser 4.
”Aunado a esto, la universidad te empuja un examen PET para poder titularte, cuando en la misma UAP basta sólo pasar los 4 niveles. Para este momento estarán pensando, ‘este pinche flaco es un pendejo para el inglés y nos viene a tirar el chorote’, pues resulta que soy muy estúpido para el inglés, pero muchos de mis compañeros que han estado conmigo en los cursos de tal materia son unos bilingües con conocimientos amplios y la escuela, sólo por chingarlos, simplemente se ha hecho de la vista gorda haciéndoles repetir un curso en distintas ocasiones.
”Ahora, según esto, yo no puedo titularme si no paso el examen, pero de que diablos sirve titularse si hay muy poco trabajo para titulados, el 90 por ciento de la bolsa de trabajo es para carreras truncas o chavos que llegaron a la prepa o secundaria (y aún así ganan más de lo que un licenciado haría).
”De haber sabido, pues fácil termino la prepa y me pongo a trabajar de barman o de vendedor de piso en un Chedraui.
”Pero, bueno, no hay pedo. Los patrones siempre van a querer que sus trabajadores sean unos Asshole’s completos para así poder tener su puesto bien asegurado.”
Servido.
La neutralidad
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