1. En todos los pueblos del mundo, en todas las épocas, los ciudadanos defienden en primer lugar, incluyendo en el ahora desaparecido paraíso comunista, en primer lugar sus intereses personales, en segundo lugar los de sus comunidades, y en tercer lugar en caso de estar educados en la solidaridad, se unirían y lucharían por los intereses generales.
2. Los señores propietarios de los terrenos que serán afectados por el famoso Arco Norte, realmente lo que desean es que les paguen a buen precio los metros cuadrados que le sean desprendidos.
3. Algunos de Morelos, Tlaxcala y Puebla luchan denodadamente en contra de un gasoducto que técnicamente al decir de los especialistas pone a comunidades enteras de miles de seres humanos, ante la posibilidad de una catástrofe, toda vez que el ramal está cerca de la zona volcánica, de impredecible erupción o movimientos telúricos.
4. El agua significa la vida entera para cualquier ser vivo. En nuestra sociedad de capitalismo atrasado donde los servicios públicos debido a la pobreza de los mexicanos son deficitarios en alto grado, e incluso en muchas zonas de nuestro país inexistentes, el entregar la administración a particulares, nos agrede universalmente, pues la obligación de cualquier inversor en un negocio es ganar dinero, y no andar haciendo actos de filantropía donde los pobres deben ser beneficiados.
4.1. ¿Sí con administraciones de gobiernos supuestamente populares, democráticos, buscadores de acciones humanistas, el agua potable y el drenaje son casi exclusivos para algunos grupos sociales de donde parte la peregrina idea que comerciantes del agua la introducirán en zonas de pobreza?
5. En un Estado de derecho creándose diariamente a contracorriente de mentalidades totalmente primitivas, es muy difícil encontrar una justicia aceptable. Todos los que violentamos alguna norma, corrompemos, cooptamos, o intimidamos al que defiende sus derechos; luego entonces los apresamientos legales, de los opositores a cualquier obra gubernamental, no están legitimados por limpias inquisiciones de los ministerios públicos, sino adecuados como acto represivo, o cuando menos esa impresión causan los procesos existentes materia de inconformidad, presentados a nivel nacional ante el ente vigilante del respeto a los derechos humanos.
6. La gobernación poblana tiene obligación de atender cualquier inconformidad de cualquier ciudadano, y más aún cuando educados en la insolidaridad, desfilamos protestando contra actos gubernamentales que nos agreden. De ahí que la instalación de diversas mesas de acuerdos para resolver problemas sociales despierte en algunos de nosotros la certeza de ser atendidos oportunamente, para no inflamar los ya secos terrenos de actos insurreccionales.
Nuestra casa
Todo indica que el ayuntamiento angelopolitano tiene una concepción clara de lo que hay que resolver a pequeño, mediano y largo plazo.