1.- Existe actualmente memoria fresca de tres sonadas derrotas del partido tricolor por el cual voto.  A final de cuentas en una Democracia Electoral y atrasada, pasmada en su evolución hacia una Democracia de Bienestar Electoral, el PRI dentro de los malos agrupamientos políticos partidarios electorales (no escribí políticos sociales), es el mejor organizado en sus cuadros de base, cuerpos intermedios y dirigencia capacitada en el tipo de política que se practique en México.

1.1.- En la época de Don Manuel, en elecciones intermedias, el PRI solo triunfa (como siempre con sus leales y obstinados marginados) en aldeas, rancherías, y uno que otro municipio pequeño o mediano; se pierden de veinte ciudades principales catorce o quince, nos derrotan numéricamente en las diputaciones locales, dejando un amargo sabor de boca proveniente de la estruendosa derrota.

1.2.- La oposición en son de burla en todas partes reza: “Bartlett es solo gobernador de pueblos y aldeas”.

1.3.- Nacho Mier, presidente del CDE del PRI, seguramente ordenado por el gobernador, le imprime método a la derrota, recurriendo a especialistas en diagnósticos sociales, para encontrar respuestas a una sola pregunta: ¿por qué las clases medias medias, las medias bajas y las ilustradas votaron contra el PRI?

2.- A resultas del diagnóstico de marras, el partido empieza a trabajar en forma incesante para reencontrar al electorado perdido. Don Manuel, “gobernador de aldeas y rancherías”, hasta altas horas de la noche acude a todos los centros de población aportando soluciones mutuas con las autoridades nacientes.

2.1.- Su conducción pasa desapercibida para la prensa en general de esos días, y entrega a su salida como gobernador todos los triunfos electorales.

3.- La segunda derrota nos la obsequia el actual ejecutivo del estado por motivos harto conocidos, poco divulgados, pero extraordinariamente chismeados (que no comentados) en cualquier cenáculo o desayunadero.

3.1.- Durante 66 meses de gobierno panista jamás el PRI, sus líderes, pudieron armar una oposición política y mucho menos una oposición de beneficio social.

3.2.- Las causas son simples, todos ellos ansiaban y lo demostraron con hechos servir incondicionalmente al señor gobernador Moreno Valle Rosas. Abusando de la indignidad personal hubo un momento en que un delegado del CEN del PRI, enviado para hacernos triunfar en elecciones herramentizadas, acompañaba al presidente del CDE durante las noches a casa de gobierno para presentar los nombres de los candidatos, que ahí naturalmente eran aprobados o tachados.

3.3.- Después de la derrota del 2013, al igual que después de la del 2010, el priismo dirigente siguió sirviendo con incondicionalidad de empleados a los fines morenovallistas.

3.4.- Alejados de sentimientos, emociones y pasiones, aplicando la racionalidad, todos y cada uno de los priistas (activistas-militantes-simpatizantes) debimos ser consultados micro-geográficamente (como lo hizo en unos momentos salinistas el Señor Presidente Legítimo Andrés Manuel López Obrador).

3.5.- Esta búsqueda de verdades harto conocidos hubiese levantado los ánimos tricolores para enzarzarnos en nuevas batallas.

4.- Conocidas las causales exitosas o las de los fracasos, obligadamente tendríamos que clasificarlas para obtener las universales y las particulares que serían las propias de una región.  De ahí tendríamos todos los priistas que proponer un trabajo metodizado acorde con la realidad, toda vez que hasta este día (8/VII/2016) no hay más que especulaciones ridículas nacidas del sentimiento o de la animosidad, ante la cuarta derrota propinada en este 2016.

5.- Como ejemplo para los chismosos que no llegan ni a especuladores, sírvase Usted lector analizar las gráficas de votación de partido a partido y también las de los partidos coaligados.

Tuvimos como decía Margarita Nelken de Johann Wolfgang Von Goethe: “Tuvo el mundo en sus manos para hacerlo mejor, y no lo hizo”. 

NUESTRA CASA

Aleluya, Aleluya, ya llegaron los postres poblanos llamados chiles en nogada.