Como no había ocurrido, podría decirse nunca, en Puebla, un procurador, ahora fiscal, habría reconocido que la presencia del crimen organizado había incrementado las listas de ejecuciones y desapariciones.

De hecho, cuando el fiscal Víctor Carrancá Bourget, comparecía ante el Congreso del Estado, al menos 6 ejecuciones eran del conocimiento público.

En Atlixco dos hombres fueron asesinados con disparos de arma de fuego, por asuntos de narcomenudeo, además de que en Huixcolotla fue hallada una fosa clandestina, la segunda en dos meses, donde fueron encontrados dos cuerpos.

Restos óseos fueron localizados en un sembradío en Tlalancaleca, además de otro crimen más en la Sierra Norte del estado.

Para demostrar el hartazgo de los poblados del incremento de la delincuencia, en San Martín Texmelucan un presunto ladrón fue pinchado por los habitantes.

Todo, el día del informe del fiscal Carrancá.

Las verdades a medias

Pero pese a que el fiscal reconoció la presencia del crimen organizado en Puebla, no reconoció que el incremento de la violencia obedece a la llegada del Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG).

Este cártel llegó para hacer una limpia de otro grupo delictivo identificado como “Los Zetas”, lo que ha desatado una cadena de enfrentamientos, de ejecuciones, de desapariciones, además de secuestros, extorsiones, asaltos y otros más.

Tampoco se mencionó que esta guerra de cárteles ha dejado víctimas circunstanciales como la del menor de 16 años de edad que en Zacatlán quedó en medio de un enfrentamiento entre dos grupos armados y murió al recibir un balazo en el tórax.

O los menores que son utilizados como halcones, sicarios, en el robo de hidrocarburos en más de 67 municipios de Puebla.

Se trató de un informe que dejó mucha información en el tintero.

Una cosa sí es cierta, Puebla es una zona caliente.

Y sin recursos, pues menos

Hay que resaltar que en el informe quedó en claro que en esta administración de gobierno la Fiscalía General del Estado ha recibido poco apoyo para la persecución de delitos.

El fiscal se quejó de que no ha recibido recursos para trabajar.

Lo que lleva a una pregunta importante.

¿Será que el fiscal no está en la cartera de amigos de esta administración?

Nos vemos cuando nos veamos.