Si en este momento usted decidiera calificar las comparecencias ante el Congreso del Estado de Puebla, tras el primer informe de gobierno de Antonio Gali, ¿cómo evaluaría al secretario de Gobierno, Diódoro Carrasco; al fiscal general del estado, Víctor Antonio Carracá Bourget, o al secretario de Seguridad Pública del estado, Jesús Morales Rodríguez?
Si usted se enteró de cómo les fue a estos tres personajes que tienen que ver con la seguridad de los poblanos, debió saber que uno que salió bien librado, no sólo ante el señalamiento de los diputados, sino ante las mismas cifras de aciertos, fue el secretario de Seguridad Pública, Morales Rodríguez.
Y le explico, a don Diódoro lo cuestionaron por los 23 linchamientos que ocurrieron en territorio poblano y los 109 intentos de linchamientos, debido a la negligente negociación y en otros casos nula intervención del personal de esta secretaría que debería ser especializado para poder controlar turbas y rescatar a quienes fueron atacados por indignados por tanta inseguridad.
Además del espionaje telefónico, este personaje fue criticado por no atender con una Alerta de Género, los casos de las más de 100 mujeres que fueron asesinadas durante el año 2017, además de las amenazas a periodistas, sobre todo por lo relacionado al robo de hidrocarburo en la zona de “El Triangulo Rojo”.
Al fiscal general, Víctor Carrancá, le llovieron las quejas por lo mal que opera la Fiscalía General del Estado (FGE), ante el Nuevo Sistema de Justicia Penal, lo que ocasiona una total lentitud no solo en la recepción de denuncias, sino en la misma integración de las carpetas de investigación, además del poco resultado por parte de la Policía Ministerial del Estado (PME) o la Agencia Estatal de Investigación (AEI).
Las respuestas se esmeraron en direccionar la responsabilidad ante tanto tortuguismo y poca respuesta de los agentes a la escasa atención del gobierno de Puebla, para fortalecer las áreas con más personal, inmobiliario, vehículos, armamento.
Pero quien sí llegó con un expediente de resultados fue el secretario de Seguridad Pública, Jesús Morales Rodríguez, quien desde su arribo incrementó los resultados de la lucha contra el robo de hidrocarburos, además de que encabezó una limpia discreta en contra de mandos que estaban comprometidos con diversos tipos de mafias.
Pero además de resultados el secretario llegó provisto de una agenda de mejoras para el personal de la SSP, como la de un aumento de sueldo.
No faltó el reconocimiento de la diputada María del Socorro Quezada del PRD, quien no sólo lo felicitó por su trabajo como titular de la SSP, sino desde cuando estaba a cargo de Protección Civil del estado.
Temblor en el Tribunal Superior de Justicia
Roberto Flores Toledano, el expresidente del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), no debió haber dormido tan tranquilo.
Uno de sus hombres de confianza, a quien le dio empleo pese a que no estaba titulado como abogado, fue detenido por elementos de la Agencia Estatal de Investigación (AEI), como presunto responsable del delito de fraude.
Parece que en curso hay una investigación en contra de aviadores que estaban cobrando en la nómina del TSJ, sin ser abogados.
En las próximas horas la Fiscalía General del Estado (FGE), habrá de dar un informe al respecto.
Nos vemos cuando nos veamos.