El 27 de enero de 2016 en este espacio le dimos a conocer cómo estaban operando los tres líderes del narcomenudeo en el interior del mercado “La Cuchilla”, “El Morris”, “El Negro” y “El Bistec”.
Le dimos a conocer detalles de una carta enviada a esta columna por parte de los mismos comerciantes de cómo estaban operando estos sujetos
Se dieron direcciones, lugares, apodos, que indicaban hasta dónde se había extendido el narcomenudeo.
Pero en Puebla nadie hizo caso, sólo la Procuraduría General de la República (PGR) abrió una investigación, que está a punto de concluir.
Le presento parte de esa entrega
Pandillas que han sobrevivido con pago de protección y luchas internas.
Una de estas bandas opera desde el mercado “La Cuchilla”, que ya es conocido como “cuna de la piratería”.
En esta “Cuchilla” se gestó un grupo criminal dedicado no solo a la fabricación y venta de discos pirata, también a la distribución de drogas.
Una carta llegada a esta columna señala como principales sospechosos a: Aarón Onatan López (a) “El Negro” y Marcos Flores Campos “El Morris”.
“El Negro” es uno de los hombres a quienes los comerciantes de ese mercado identifican como “el más peligroso”, este hombre tiene una casa en la colonia El Encinar con circuito cerrado, vigilancia —hombres armados— dentro y fuera de su vivienda.
Su red de operaciones se extiende a las colonias Barranca Honda, Cerritos, Central de Abasto, La Loma, Bosques de Amalucan, además de varias calles del Centro Histórico.
“El Morris”, el segundo hombre peligroso opera en la Unidad Habitacional Rivera Anaya, él se encarga de distribuir drogas a sus “vendedores”, para lo cual utiliza un vehículo Passat de color gris con placas de Puebla.
Sus vendedores de estos sujetos son conocidos por los apodos: “Miguel”, quien opera en Barranca Honda, Cerritos y Central de Abasto; “El Bocho” en La Loma; “El Chango”, recién salido del penal de San Miguel, en una narcotienda del tercer piso de un edificio ubicado en calle Orquídeas; “El Ratón”, en la 28 Poniente y la 3 Norte del Centro Histórico, además de “El Bisteck”, quien es hermano de “El Morris”, Miguel Ángel Ruiz, quien a bordo de un taxi Jetta distribuye drogas en bares, antros y domicilios.
Lo más grave del asunto es que “El Negro”, quien ha amasado una fortuna con sus ilícitas actividades, a grado tal que es dueño de concesiones de la ruta 37, además de lavanderías y departamentos, se hace pasar como policía, de hecho porta un chaleco antibalas y siempre anda armado y acompañado de al menos 6 o 7 sujetos de quienes dice son sus “sicarios”.
“El Negro”, “El Morris” y “El Bisteck” se hacen pasar como policías para levantar a quienes llegan al mercado de “La Cuchilla” para comprar discos al mayoreo, principalmente si vienen de otro municipio.
Los mantienen privados de su libertad para luego robarles los discos que compraron, el poco dinero que les queda y todavía los amenazan diciéndoles que para que puedan seguir vendiendo tienen que pagarles “una renta”.
Hasta aquí la entrega
Y ahora resulta que nadie, ni Seguridad Pública del municipio saben de quién estamos hablando...
Nos vemos cuando nos veamos.