Esto sí que es importante; la Feria de San Marcos que es “La Feria” ya se ha hecho entrega de los premios correspondientes a los triunfadores de la versión 2018 de la feria de Aguascalientes, destaca de manera importante que 3 tauro tlaxcaltecas 3 hayan resultado premiados: Sergio Flores el joven Matador de Apizaco como Triunfador de la Feria, la casa ganadera de “La Joya”, propiedad de don José Antonio González Esnaurrizar de puro encaste “Parlade” lleva a su sala de trofeos el del Mejor Encierro y el varilarguero Othón Salinas Ortega va a casa con reconocimiento al mejor picador. En hora buena a los tres y que esto sea un buen estímulo a continuar con sus carreras y actuaciones llenas de triunfos.
Los anti taurinos – por cierto, estudios clínicos recientes demuestran que todos ellos, son como 15, tienen electroencefalograma con trazo plano de línea horizontal – continúan con problemas de diarrea mental, lanzando estupideces convertidas en insultos, mismos que además de caer en lo no creíble, por argumentos faltos de fundamento han llegado al terreno de lo ridículo. Puros intentos vanos por darse a notar y llamar la atención.
Y mientras, en la cabaña brava mexicana en “La Antigua” de don Jorge D’ Haro donde éstas dos muy “buen puestas” y guapas señoras cárdenas, cornipasas, verdaderas majas y en España estos jarifos erales de capa ensabanada, acaramelados, y su parentela pastan en bellos campos en casa ganadera de “Prieto de la Cal”. Así de hermosos son los hatos ganaderos, potreros donde predominan lo verde, la amplitud, y la libertad para retozar a gusto En realidad, detrás de la fiesta hay un culto, un cuidado excesivo en el que el Toro además de ser el principal protagonista, es el Rey y recibe todos los cuidados que su condición majestuosa reclama.
De verdad, un enorme gusto atender desde el Palco de las broncas en la Plaza “El Pinal” de la Perla de la sierra poblana, Teziutlán a una gran figura, Andy Cartagena quien tumbó las 2 orejas 2 a “Músico” su primero de “José María Arturo Huerta” y en su segundo, “Luna llena” faena de rabo, todo quedó en una peluda en mano, pues al realizar dos fallidos intentos de pega los forçados “Amadores” serranos, el toro ya no empujo en el rejón de muerte y después de rejones de castigo; garapullos largos, cortos, rosas, todos quedaron en el diámetro de un plato de postre, una oreja fue el trofeo.
Alternó Cartagena esa tarde con Uriel Moreno “El Zapata”, que también salió a hombros con el corte de las dos orejas de su segundo, “Veneciano” nombre que recibió “Arrastre Lento” y fuerte petición de oreja en su primero, no atendida por tardar buen tiempo, el burel en caer. El tercero en alternar fue el fino Juan Pablo Llaguno con la oreja de su primero; toro que fue despedido con ovación en el arrastre, y pérdida de trofeo en el cierra plaza por fallas con la toledana.
En un párrafo superior lo afirmamos; la majestuosidad del Rey de la fiesta en todo su esplendor en el campo bravo, aquí pasean y pasen a su entero antojo los toros de lidia en el campo bravo tlaxcalteca, “Junto al cerro de cal” que en lengua náhuatl eso significa Tenexac, una casa ganadera que además es Reserva Ecológica, donde está proscrita la caza y además es también por decretos publicados en el diario oficial, Santuario de Aves. Ahora bien, ¿Qué ocurre con los toros bravos – que no son animales propiamente domésticos ni verdaderamente salvajes? ¿Qué deberes tenemos para con ellos? La respuesta, la da Tauromaquia mexicana = Preservando su naturaleza brava, criarlos respetando su naturaleza (puesto que saló viven para eso) y matarlos conforme a su fiereza y fuerza natural.