1.- Gracias al señor tan mal entendido como comunicador, para mi extraordinario poblano, con I.Q. superior a muchos de yos (no escribí nosotros para no ofender a muchos), y mi amigo —sí, no me niega— Don Claudio de la Llata, descendiente de una de las familias grandes de Puebla, entendido estoy de la existencia del ciudadano mexicano Don Javier Lozano Alarcón.

2.- Joven talentoso, con ascendientes también de una de las grandes de la Angelópolis, Los Alarcón, el citado se educa en la Roma (el DF), ahí igual desarrollo personal posee, gracias a la relación familiar ajena a mi conocencia por mis orígenes mixtecos cuasi rurales, tan ajenos a los rituales de la relación humana de las urbes.

3.- Supe de su existencia como político partidario electoral, cuando candidato aprobado con entusiasmo por Don Melquiades Morales Flores, fracasó en su intentona priista de ser diputado federal, obteniendo la votación tricolor más baja de los 300 competidores a ser miembros del Congreso General por el ente de la ausente ya ha tiempo: “Democracia y Justicia Social”.

4.- Bajo la égida o conducción de la República, por el ranchero gracioso que es Don Vicente Fox y Quesada, el joven poblano Lozano Alarcón sirvió a los intereses válidos de los capitalistas patronales —no empresariales—, que atendió como Secretario del Trabajo en la Administración Federal.

5.- Nada reprochable merece en sus haceres, que no fuera, el no haber ordenado o intervenido para rescatar a los cadáveres de los mineros obreros de la mina Pasta de Conchos, propiedad de una familia reconocida por ser dueña de miles de millones en dólares, acrecentados gracias a: pagar bajos sueldos, eludir Seguridad Social para sus obreros, corromper autoridades, exportar dinero mexicano a paraísos fiscales, apoyados por gobiernos corruptos, cuando menos hasta hoy.

6.- Javier, el priista, el después panista, bajo el artilugio antediluviano de que el primer priista Enrique Peña Nieto lo ordenó, fue incorporado a un alto rango en la campaña presidencial al lado del buen: padre de familia, católico, y totalmente ajeno a encuentros con la sociedad abierta. Los resultados vistos hablan.

7.- En el proceso de auto aniquilamiento del neo priismo, heredero del ortodoxo que creó la institucionalidad nacional, detenta el CEN del tricolor económica y administrativamente, una guardia pretoriana formada por parentescos sanguíneos o legales entre sí, los cuales acomódanse en los principales encargos administrativos, políticos o surten de proveedurías de bienes o servicios a los gobiernos de ese partido que ganan elecciones.

8.- Como el CEN decide candidaturas, dice el viejo militante activista Santiago Oñate Laborde, que el CEN ha dispuesto que el citado Lozano Alarcón sea el candidato a gobernador por Puebla en las elecciones por venir.

9.- Como socio-antropológicamente; los herederos del “Turco, Plutarco Elías Calles” obedientes son —aunque no todos—, con tal producto para ser ofertado en el mercado potencial de compra de productos políticos, tiene el PRI según los 20 textos de libros de Negocios de Harvard:

a).- Posicionarlo en todo el estado (darlo a conocer).

b).- Con publicidad convencer a los compradores que es buen producto para adquirirse.

Desafortunadamente para las bases de marginados, no habrá nada que obsequiarlos en la campaña como tanques de agua para azoteas, cobijas, techumbres de lata, cubetas, envases de plástico, delantales, despensas. En fin lo usual. “Las cosas son como son. No como deben Ser”.

NUESTRA CASA

El INAH ha informado que avanzan las restauraciones a su encargo. No perderemos las alhajas que son parte de nuestra poblana identidad.