Otro fracaso más resultó el operativo de la Fiscalía General del Estado, la tarde del sábado 16 de noviembre, para atender en Puebla asuntos de narcomenudeo.
La intención era la de capturar a uno de los líderes de una red de narcomenudeo y este se les escapó, además de que no pudieron detener a ninguno de los integrantes de esta banda.
Un servidor se refiere a cuatro cateos simultáneos que realizó la Secretaria de Seguridad Pública del Estado, la Guardia Nacional y la FGE, en el Barrio de Xanenetla, la Junta Auxiliar de la Libertad, y la Unidad Habitacional de San Bartolo, que dejó como saldo solo 21 detenidos al Juzgado Calificador, porque se trató solo de viciosos.
La realidad de todo este asunto es que la FGE, a través de la Unidad Especializada en Técnicas de Investigación y Cateos en el Estado, a cargo de José Manuel Ramírez Pinzón, tenía la intención de capturar a un sujeto identificado con el apodo de El Pecas, quien dirige una banda de narcomenudistas y este se les escapó.
Este sujeto es buscado por la FGE, no solo por narcomenudeo y todos los delitos que este derivan, sino por haberle disparado a un elemento de la Policía Municipal en pleno rostro.
Todo parece indicar que desde el interior de la Secretaria de Seguridad Ciudadana del municipio de Puebla se filtró la información de que El Pecas, iba a ser detenido y este escapó, junto con los integrantes de su banda.
La principal narcotiendita, donde se suponía estaba oculto este personaje, se ubica en la 6 Norte, lugar donde se registró más presencia policiaca y donde hallaron diversos tipos de drogas, además de armas largas y cortas.
De las 4 revisiones solo hubo 21 detenidos, pero de todos estos ninguno tenía relación con delitos de narcomenudeo y solo se trató de viciosos que fueron presentados ante un Juez Calificador.
De las drogas aseguradas, nadie dio algún detalle de la cantidad, además del tipo, solo fueron presentadas a una autoridad competente.
El Pecas se les escapó.
El operativo que terminó con mentadas de madre
Yolanda Torres, agente del Ministerio Público, quien estuvo a cargo de la coordinación del cateo de la casa de la 6 Norte y el comandante de la Policía Ministerial, David Chirinos, quien estuvo a cargo de las diligencias ministeriales en ese lugar, no solo se mentaron la madre, sino que hasta se dijeron de lo que se iban a morir.
Todos quienes acudieron a ese operativo de cateo fueron testigos de los gritos de ambos, porque fue a plena calle y sin inhibiciones.
El comandante Chirinos estaba molesto porque el personal de la Policía del Estado, antes de que se iniciara la intervención ya tenía 4 detenidos, que no saben de dónde los trajeron.
El comandante le gritó diciéndole que "no iba a dar legalidad a lo manoseado por los Estatales", que ellos los pusieran a disposición.
En medio del griterío llegó el también comandante Arturo González Rojas, con la clave de Platino Centro, quien no sabía ni la “O” por lo redondo de lo que estaba pasando y como no le gusta acudir a las reuniones de seguridad, donde se organizan estos cateos, no le quedó más que ordenar que se metiera el personal, pero realmente no sabía lo que estaba pasando.
Otro que tampoco se presentó a su trabajo, porque le correspondía, fue Juan Luis Galán Ruiz, director de la Policía Ministerial del Estado y que en su lugar mando a la jefe de grupo Karina Santell, quien tiene el cargo de directora de la Unidad de Investigación Cibernética (UIC), quien tampoco supo que hacer.
Toda la maraña de bolas la tuvo que componer el director de cateos José Manuel Pinzón, quien regañó a la Ministerio Público y al comandante Chirinos, para que los dos se pusieran a trabajar y continuaran con las diligencias.
Al final todo resultó ser un fiasco total, digno del quehacer diario del titular de la FGE, Gilberto Higuera Bernal.
Que se va Bernal y llega Ardelio
Y todo parece indicar que, a partir del 29 de noviembre, se va Gilberto Higuera Bernal, del encargo de la Fiscalía General del Estado, que desde el despacho del gobernador Miguel Barbosa, ya está listo el relevo.
Todo indica que el nuevo Fiscal que será avalado e impulsado por el Congreso del Estado es Ardelio Vargas Fosado, extitular del Instituto Nacional de Migración, en la administración de Enrique Peña Nieto, como presidente de la República, además de exsecretario de Seguridad Pública del Estado del extinto Rafael Moreno Valle.
El logro de Vargas Fosado, además de ser amigo del gobernador Barbosa, es que desde la Sierra Norte colaboró en su campaña política y las facturas son para cobrarse.
Nos vemos cuando nos veamos