Un tema que dará mucho de qué hablar en los próximos días será la reforma al artículo 191 del Código Penal para sancionar la piratería en el transporte. La propuesta incluye castigar hasta con 10 años de prisión, sin embargo, la pena no será sólo para los taxis como se consideró en un inicio. También incluirá a las unidades de arrastre y salvamento, en otras palabras estamos hablando de las grúas.
Los enterados aseguran que hasta el pasado sábado la iniciativa enviada por el gobernador Miguel Barbosa, contemplaba sólo a los taxis, pero de pronto algo pasó y se amplió. El texto que se aprobó ayer jueves en la Comisión de Procuración y Administración de Justicia, ya incluía el tema de sancionar a las unidades de arrastre.
Las sanciones contra quienes manejen “transportes piratas” va desde la detención del conductor, incautación de la unidad, pago de una multa y podrían alcanzar hasta 10 años de prisión “si el delito es cometido o interviene en él de cualquier forma el representante, socio o líder de una persona jurídica colectiva concesionaria o permisionaria del servicio de transporte público, de arrastre y salvamento. Además, se impondrá la revocación o cancelación de las concesiones, permisos y autorizaciones que para prestar dicho servicio hayan sido otorgados por la autoridad estatal”.
Si tomamos en cuenta que una de las organizaciones señaladas de permitir que utilicen su emblema para operar el transporte público fuera de la ley, es Antorcha Campesina y que esa misma agrupación fue marcada por el caso de la Ruta 25 donde en agosto de 2019 una mujer fue violada en una unidad pirata, es claro que la iniciativa tiene un destinatario.
Ahora Antorcha Campesina, la misma que no obtuvo el registro como partido político, deberá poner sus barbas a remojar y darse cuenta de que si una de las unidades de transporte o grúas es detenida por no contar con el permiso habrá el retiro de las concesiones.
Recordemos cómo entre 1980 y 1989, muchos taxis circularon sin placas, sólo portando el escudo de la UPVA 28 de Octubre que les protegía ante los operativos. Casi 40 años después algunos vivos se escudan con calcomanías o pegotes de Antorcha Campesina en sus unidades, pero si los agarran una vez que se apruebe la reforma, perderán sus unidades y hasta la libertad.
De esta forma, así como están los danzones, en el Congreso del Estado podrían desde el estrado anunciar: “Nueva ley dedicada a... Antorcha Campesina y piratas que les acompañan”.
Diputada Saavedra guarda el rosario
La diputada María del Carmen Saavedra Fernández anunció que se incorpora a la bancada de Morena en el Congreso del Estado, su argumento es que quiere mayor oportunidad para presentar iniciativas, ojo, no dijo que comparte la ideología de izquierda o que busca sumase a proyectos progresistas. Lo dijo claro, quiere reflectores.
La diputada por Teziutlán fue una morenovallista convencida. Llegó a su curul por el Partido Acción Nacional. Hace un año, después de la muerte de Rafael y tras pelearse con Genoveva Huerta, renunció a la bancada blanquiazul. Entonces se dijo independiente y se sumó a ese grupo que amasó Marcelo García. 12 meses después es la diputada número 14 de Morena.
Hay memoria y quienes conocemos de la política tenemos claro que la diputada se ha inclinado más a la derecha en sus posiciones. Recordemos que a mediados de año cuando habló en comisiones sobre el aborto, sostuvo que ella siempre estará a favor de la vida, repartió pañuelos azules, rechazó la posibilidad de despenalizar la interrupción del embarazo y criticó el documento presentado por Rocío García Olmedo.
La mujer que hoy está en el bloque de Morena, que en esencia debería ser progresista y con una ideología de izquierda, dijo que de aprobarse la despenalización del aborto, se llegaría al extremo de que miles de mujeres lo practicaran sin responsabilidad alguna. Sobre los derechos reproductivos y sexuales de ellas, no dijo ni media palabra.
La duda mata, ¿Ahora que está en Morena, ya no saldrá con rosario en mano?