Ahora que se notificó al Cabildo de Tehuacán sobre la intención para lograr su disolución y que entraría en funciones un Concejo Municipal, es momento de reconocer que la segunda ciudad más importante de Puebla se encuentra sumergida en un pozo, principalmente por la inseguridad y sus últimos malos gobernantes.
El municipio que colinda con Veracruz cuenta con una importante industria textil, también con una de las refresqueras más reconocidas del país, hay atractivos turísticos, pero el desarrollo se ha vuelto cada vez más difícil.
Ese diagnóstico lo conoce y muy bien el gobernador Miguel Barbosa, no sólo porque es su tierra natal, sino porque continuamente se traslada a Tehuacán, en donde continúa escuchando la voz de los tehuacaneros.
El próximo lunes será importante escuchar qué es lo que el alcalde suplente, la síndico y los regidores del municipio de Tehuacán responden ante las inquietudes de los diputados. En las preguntas y en las respuestas podremos entender de qué tamaño es el daño al erario y también si detrás de esta histórica resolución se encuentran razones jurídicas o simplemente políticas.
Por lo pronto a los tehuacaneros les preocupa nuevamente la situación de gobernanza en su municipio porque entre la salida abrupta de Felipe Patjane, quien actualmente se encuentra recluido, y los seis meses que se quedaron sin alcalde, las cosas no pintan bien.
¿Negligencia en la Defensoría Pública?
Patricia Olarte Córdoba, directora General en la Defensoría Pública y María del Pilar Cerón Cabrera, directora de Área, podrían encontrarse en serios problemas en caso de que se comprueben las acusaciones que hasta esta columna nos hicieron llegar.
Cuentan que ambas funcionarias públicas dieron positivo a una prueba de Covid, sin embargo, al no presentar síntomas graves decidieron continuar con sus actividades laborales en sus oficinas. Durante su enfermedad, “continuaron acercándose y teniendo contacto con diversos empleados así como usuarios de los servicios y servidores públicos de otras instituciones”, afirma una carta.
Esta acción negligente e irresponsable ocasionó que el número de contagios entre los trabajadores de la Defensoría Pública aumentara, incluso el virus infectó a personas en “diversas áreas de la defensoría pública sean adscripciones de Distritos Judiciales así como algunas de la capital del Estado como el denominado C-5”.
Finalmente los trabajadores de la Dirección General de Defensoría Pública solicitan al gobierno de Miguel Barbosa, un castigo ejemplar para ambas funcionarias públicas, en caso de que se compruebe su negligencia.
Otra de alcaldes
El pésimo trabajo de muchos presidentes municipales en Puebla hartó a los pobladores, muestra de ese enojo, son desde las protestas violentas y tomas de Ayuntamientos, hasta los linchamientos y las solicitudes de destitución de los alcaldes.
Jorge Alejandro Vera Palacios, presidente municipal de Rafael Lara Grajales, fue acusado desde marzo de este año por algunos de los regidores de ese Cabildo, por mal manejo de los recursos públicos.
El alcalde emanado de Movimiento Ciudadano no ha querido sesionar desde enero, señala un oficio dirigido a Gabriel Biestro, presidente del Congreso, en el cual agregan que el edil ha cometido una “serie de irregularidades y anomalías en contra de nuestro amado municipio”.
Con esta solicitud, la lista de procesos en los cuales se pide la destitución de diferentes presidentes municipales aumenta y seguramente en breve la Comisión de Gobernación del Congreso del Estado informará cuál es el curso de esta petición.
Y si usted considera que se trata de uno más de los 217 municipios de Puebla, le recuerdo que el ayuntamiento de Vera Palacios es uno de los que se encuentra en la llamada “Zona Audi”.
