El duro golpe a la impunidad poblana para el robo de hidrocarburos, nada más en la zona del Triángulo Rojo, que asestó el gobierno Federal, con la captura de Pedro N., (a) El Perico es uno de los principales móviles del nuevo incremento de la violencia en el municipio de Tepeaca, incluso el de la ejecución del máximo líder de vendedores ambulantes José Luis Salazar Galicia.

Desde la detención de El Perico y al menos de 8 sujetos que componían su principal círculo de seguridad, el gobierno de Puebla ha guardado absoluto silencio, por la complicidad de las corporaciones de policía tanto locales, como del estado e incluso federales, porque la delegación Puebla de la Fiscalía General de la República está directamente implicada en la protección del robo de hidrocarburos.

Pedro N., El Perico fue detenido la mañana del miércoles 25 de junio, como consecuencia de los cateos realizados por la FGR, con apoyo de la Policía Federal y de la Guardia Nacional, en respuesta a una orden directa del gobierno federal, tras ser ubicado uno de los principales varones del robo de gas LP.

Los cateos ocurridos en inmuebles de los municipios de Acatzingo y de Tepeaca, además de la detención del presunto líder huachicolero y huachigasero, dejó como consecuencia el aseguramiento de propiedades, vehículos, dinero, drogas, además de animales exóticos, caballos pura sangre e inclusive ponis y otros valores adquiridos mediante lavado de dinero.

Y resulta extraño que tal detención no tuvo no la más mínima publicidad, sobre todo, en el estado de Puebla, además de que marcó el preámbulo de otra importante detención de otro mafioso, ubicado en el Estado de Tlaxcala.

La mañana del domingo 28 de junio, a través de su cuenta Twitter, Miguel Barbosa Huerta, gobernador de Puebla, informó que Oscar G. T, (a), El Loco Téllez, líder del robo de hidrocarburos en la región de San Martín Texmelucan y sus alrededores, además de varios municipios de la Sierra Norte del estado, había sido detenido en el estado de Tlaxcala.

Es decir, tres días después de la caída de El Perico, fue detenido El Loco Téllez, tras una persecución en las colonias de los municipios de Jesús y San Juan del municipio de Apizaco, donde coincidentemente fue ubicado.

Pero las coincidencias no terminan aquí, después, el 2 de agosto, en el estado de Guanajuato, fue detenido José Antonio Yepéz Ortiz, presunto líder del cartel del robo de hidrocarburos del llamado cartel de Santa Rosa de Lima, quien presuntamente en la ciudad de Cholula tenía una bodega con explosivos de alta peligrosidad.

Y tras todas esas coincidencias han ocurrido en municipios como el de Tepeaca, ejecuciones públicas como la del líder de la organización de comerciantes Ignacio Zaragoza, además de homicidios en cadena donde resalta la complicidad de la policía municipal, además de la Fiscalía General del Estado, por no ordenar seguridad para quienes fueron testigos y a la vez víctimas de un ataque armado.

Y todas las coincidencias se hacen posibles ante un silencio sepulcral de una Fiscalía que ha probado ser la más despreocupada, como en la antigua Sinaloa, que se prepara para un cambio total de piel, porque el color ya lo tiene.

Nos vemos cuando nos veamos.