La titular de Protección Civil de Puebla, Ana Lucia Hill Mayoral, se sentó en un barril de pólvora, cuando decidió incluir en su dirección a un personaje que prácticamente corrieron a patadas de Tehuacán, por un negro historial que incluye desde denuncias por acoso sexual, hasta negocios con representantes de gaseras.

A principios de octubre, se confirmó la destitución de Juan Carlos Salazar Ferman como director de Protección Civil y Bomberos en esa ciudad, pero más tardó en concluir el proceso de entrega-recepción que en encontrarse con otra oportunidad de negocio, perdón, con un nuevo empleo.

Les comento que Ana Lucia Hill colocó a Juan Carlos Salazar Ferman en el área operativa. La directora de Protección Civil lo trajo específicamente para que sea el responsable de “supervisar y certificar” comercios.

Salazar Ferman resultó toda una fichita. Durante el año y medio que estuvo al frente de Protección Civil y Bomberos de Tehuacán se vio envuelto en rumores de corrupción. Tres escándalos concretos marcaron su paso por la dirección tehuacanera: la denuncia en su contra interpuesta en la FGE por acoso sexual; el accidente vial que ocasionó con un vehículo oficial y donde dejó abandonada a la víctima; y las reuniones a puertas cerradas con gerentes de gaseras y repartidores de cilindros de gas LP.

De acuerdo con los trascendidos periodísticos de la región, Juan Carlos Salazar dio órdenes para que su dirección se hiciera de la vista gorda en cuanto al cumplimiento de las gaseras con las normas de protección civil; a cambio de jugosos beneficios económicos.

Y aunque usted no lo crea, con estos negros antecedentes, lo incorporaron ahora en la dirección de PC estatal.

¿Qué le garantiza a Ana Lucia Hill que el funcionario público se conducirá de manera correcta y que no realizará más negocios por debajo del agua que pongan en riesgo a la población de todo el estado? O acaso ¿No sabía de estos señalamientos Hill Mayoral?

Y una tercera pregunta: Ahora que ya lo sabe ¿Qué antepondrá, los negocios o la seguridad de los poblanos?

Veremos y diremos.

El mudo del Congreso

Hay quienes siempre se quejan de que se violan sus derechos, que los limitan en el Congreso del Estado para que sus iniciativas, exhortos, o cualquier ocurrencia se enlisten en el orden del día. Hay testimonios de los lloriqueos que se escuchan en los pasillos del Palacio Legislativo por parte de estos personajes.

Sin embargo, cuando se les anuncia en tribuna, como por arte de magia, desaparecen.

Así le pasó nuevamente a nuestro personaje: “El Mudo Alonso”, quien abandonó la sesión a pesar de que su punto era el número 20 y en él tendría la oportunidad de dar sustento a su petición para que le devuelvan su espacio en comisiones. Casualmente, al ser llamado a tribuna, ya había desaparecido.

En el Orden del Día se precisaba la Lectura del Punto de Acuerdo de Héctor Eduardo Alonso Granados, por el cual solicitó que los Diputados integrantes de la Junta de Gobierno y Coordinación Política reconsideraran su participación para integrar las Comisiones y Comités que venía desempeñando a inicios de esta Legislatura.

En pocas letras, el misógino y homofóbico diputado, al que ya no aceptan en ningún partido, solicitó que lo volvieran a incluir en las Comisiones, como la de Seguridad, para, según él, representar y defender “los intereses de los poblanos que votaron por él”.

 

Pero su petición se quedó en el intento porque al no argumentar su punto, Héctor Alonso será sentenciado a seguir en la banca legislativa.

Y surge una nueva pregunta:

¿Para qué demonios quiere regresar a la Comisión de Seguridad, si cuando fue presidente —durante nueve meses—, sólo convocó a sesionar en cuatro ocasiones?

Esto último sólo confirma el nivel de vividores legislativos que nos heredó el tsunami lopezobradorista.